Los mayores del colectivo LGTB han comenzado una campaña para exigir que se blinden las pensiones en la Constitución y que se eleve la cuantía de las no contributivas, ya que muchos de ellos, según denuncian, carecen de pensiones de viudedad por no haber podido casarse nunca con sus parejas y apenas han cotizado porque “no nos querían contratar”.
“Es un sector de la población enormemente desprotegido y que sufre la precariedad en sus condiciones de vida, con pensiones de miseria y en muchos casos sin pensión por no haber podido cotizar, precisamente por la marginación que han sufrido por su orientación sexual o por ser transexuales”, explicó el responsable de la Fundación 26 de diciembre, Federico Armenteros, en declaraciones a Servimedia.
Por esta razón, muchos de ellos carecen de ingresos más allá de las pensiones no contributivas, que rondan los 420 euros al mes. Asimismo, hay muchos viudos por la pandemia de VIH que, al no haber podido beneficiarse del matrimonio igualitario -se aprobó en 2005-, no pueden optar a pensión de viudedad.
“Algunos están en situación de calle; otros, compartiendo piso”, explicó este activista LGTB, cuya fundación cuenta con pisos para tratar de dar cobijo a estos mayores. “Cuanto más mayores son, más perseguidos han estado y más dificultades han tenido para encontrar trabajo”, relató Armenteros.
Por ello, mayores del colectivo LGTB se concentrarán mañana, miércoles, en la Plaza de Callao para exigir un blindaje del sistema de pensiones junto a la Mesa Estatal por el Blindaje de las Pensiones (MERP), con quienes recogerán firmas para la causa.
La presidenta de la Federación Estatal LGTB, Uge Sangil, señaló por su parte que estas personas del colectivo están una “situación de bastante vulneración”, ya que sus cotizaciones han sido muy bajas y “están en situaciones de pobreza bastante importantes”.
Mañana aprovecharán para “unir reivindicaciones” con la MERP y buscar que se blinden lals pensiones en la Constitución, así como que se eleven las cuantías de las no contributivas y se ponga especial atención en los mayores LGTB que, por su invisibilidad, no ha tenido reconocido sus derechos como el matrimonio o un trabajo digno.