La población española está expuesta a un elevado número de plaguicidas a través de la alimentación porque se han encontrado residuos de pesticidas en un 34% de las muestras analizadas de alimentos, porcentaje que se eleva a un 41,69% en frutas y verduras.
Así se recoge en el informe ‘Directo a tus hormonas. Guía de alimentos disruptores’, elaborado por Ecologistas en Acción y difundido este martes. El trabajo mide la presencia de plaguicidas y pesticidas disruptores endocrinos encontramos en productos alimentarios comercializados en España.
España es el mayor consumidor de pesticidas de Europa según los últimos datos de Eurostat, correspondientes a 2017, que sitúan a España como líder europeo con la comercialización de 71.987 toneladas de plaguicidas.
Por tercer año consecutivo, Ecologistas en Acción analiza los resultados que la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) ha publicado en su web a partir de los datos disponibles del programa de residuos de pesticidas en alimentos correspondientes a 2018.
Entonces, se realizaron 467.433 análisis de pesticidas a 2.711 muestras de alimentos, lo que sitúa a España en el antepenúltimo lugar de la clasificación europea, con 5,6 muestras por cada 100.000 habitantes, mientras que la media continental es de 17,6.
Los resultados muestran que se han hallado residuos de plaguicidas en un 34% de las muestras analizadas (927 sobre 2.711) y esta circunstancia se eleva en el caso de frutas y verduras, con un 41,69%.
El listado de las 10 frutas y verduras más tóxicos lo encabezan las uvas de mesa (41 plaguicidas disruptores endocrinos detectados), por delante de la mandarina y el pimiento (33 cada uno), la pera (32), la manzana (31), la naranja y el tomate (27 cada uno), el limón (23), el pomelo (22) y la lechuga (14).
LÍMITE MÁXIMO
En 2018 se examinaron 700 plaguicidas. Los análisis incluyen sustancias cuyo uso está autorizado y también un elevado número de plaguicidas no autorizados (como DDT, lindano o endosulfán). No obstante, no todas estas sustancias fueron analizadas en todas las muestras.
Los resultados muestran que un 2,1% de las muestras de alimentos tenían restos de pesticidas superiores a los límites máximos de residuos, un porcentaje superior al 1,8% de 2017. Los datos de la UE fueron más altos (4,1% en 2017 y 4,5% en 2018).
Los alimentos que se venden en España contienen al menos 36 pesticidas con capacidad de alterar el sistema hormonal según el criterio de Pesticide Action Network Europe, o 72 pesticidas EDC (disruptores endocrinos) considerando el criterio del documento de trabajo de la Comisión Europea. Si se incluyen dos de las sustancias prohibidas detectadas (DDT y endosulfán), las cifras ascienden a 38 y 74, respectivamente.
Los programas de control de residuos de plaguicidas en alimentos no analizan todas las sustancias en uso y sólo tienen en cuenta un número limitado de plaguicidas en cada alimento, por lo que, según Ecologistas en Acción, es posible que algunos alimentos contengan más residuos de diferentes plaguicidas que los que muestran los datos.
Con el fin de proteger la salud de los ciudadanos, Ecologistas en Acción demandó a las administraciones públicas que prohíban «cuanto antes» los plaguicidas con capacidad de alterar el sistema endocrino, que transformen el sistema agrario industrializado dependiente de pesticidas a otro agroecológico y que faciliten la producción, la distribución y el acceso a productos libres de pesticidas y de origen agroecológico.
(SERVIMEDIA)