El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha vuelto a aludir a la «situación delicada» en Cataluña, y a los problemas de «convivencia» a cuenta de la inminente sentencia que ha supuesto la inhabilitación del ya expresident Quim Torra, como razón de la ausencia de Felipe VI a la entrega de despachos a los nuevos jueces que se celebró el pasado viernes en Barcelona. Ha apuntado que fue una «decisión colegiada» en la que se valoró esta situación «y otras muchas cuestiones».
Campo ha respondido de este modo a la pregunta que le ha realizado en la sesión de control de Congreso de los Diputados el diputado de Vox Ignacio Gil Lázaro, que ha reclamado conocer las razones por las que el Gobierno «impidió» la presencia del jefe del Estado en un acto al que siempre había acudido.
Como primera respuesta, el titular de Justicia ha lamentado que «con la que está cayendo» la preocupación del diputado de Vox no sea la crisis sanitaria y ha apuntado que dadas las circunstancias que rodeaban el acto en Cataluña se trató de cambiar la fecha «y no fue posible».
A ello se añadió, según ha recordado el ministro, el hecho de que al acto no confirmaran su asistencia altos cargos judiciales del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña e incluso la consejera del ramo.
Para Gil Lázaro, sin embargo, lo ocurrido fue un «veto rastrero y cobarde de este Gobierno para la sumisión a los golpistas», con el objetivo por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de seguir en el poder, algo que llegó a a calificar de «expresión de vileza moral», del Ejecutivo.
Para el parlamentario del partido liderado por Santiago Abascal, el Gobierno está dispuesto a sentarse en una mesa con los «golpistas» porque así lo requieren «el señor del moño» -en alusión al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias- y sus voceros desde el Consejo de Ministros, pese a que ello conlleve un ataque a la monarquía.
Para Campo, sin embargo, lo «impresentable y absolutamente inmoral» es convertir lo ocurrido en una crisis institucional. «Puede decir lo que quiera, pero la realidad es lo que es cuando habla de la Constitución parece algo suyo y no es suyo si no de todos los españoles», le ha contestado el ministro, que ha concluido recomendando al diputado de Vox que «busque la senda de la democracia».
PROYECTO DE PAÍS
El asunto de la ausencia del rey también ha salido a colación de otra pregunta, esta vez realizada por el diputado popular Carlos Rojas García, quien ha planteado a Campo si considera que el proyecto de país del Gobierno encaja en nuestro Estado de Derecho.
Campo ha respondido afirmativamente, aunque «otra cosa es que no le guste» al Grupo Parlamentario del PP, si bien ha defendido que el proyecto del Gobierno de Sánchez «es un proyecto inclusivo que abraza a todos y no deja a nadie fuera».
Según el titular de Justicia el proyecto socialista pivota sobre cuatro pilares, que son la justicia social, la defensa de los servicios públicos, la libertad y la cohesión social, y ello se mantiene incluso con la pandemia.
Como respuesta a estas manifestaciones el diputado del PP ha sacado a colación el asunto del rey, preguntando directamente a Campo que dijera quién tomó la decisión de vetarle en Barcelona, y añadiendo que hemos llegado a un estado donde hay ministros que atacan a los jueces y animan la ‘okupación’ de viviendas, mientras que diputados de la coalición con Podemos son investigados por atentado contra la autoridad, aludiendo con ello a la investigación abierta en el Tribunal Supremo al secretario de organización del partido morado Alberto Rodríguez. «Ese es su gobierno y su proyecto de país», ha añadido Rojas García.
«No nos vale el ministro del silencio, ese sí que se ha pasado tres pueblos y usted está calladito, defienda a los mas de 5000 jueces que se dejan la piel todos los días por servir a su país», ha añadido, en alusión a unas palabras captadas por el micrófono abierto en el acto de Barcelona y atribuidas a Campo, en las que él más tarde dijo no reconocerse.
El ministro dijo querer ser coherente con la pregunta y ha emplazado la respuesta sobre el rey a la que más tarde iba a formular el diputado de Vox, limitándose a acusar a Rojas García de participar en un proyecto, el del PP, que es el de la trinchera, el negacionismo, el no a todo, no apoyar al Gobierno en la pandemia ni en unos presupuestos de reconstrucción». «Sé que a usted no le gusta el plan del Gobierno, pero es el que hay», ha concluido.