La crisis ocasionada por la Covid-19 nos ha obligado a todos los integrantes de la sociedad a modificar muchos de nuestros hábitos y a implantar otros. La utilización de la mascarilla en los espacios públicos, el lavado frecuente de manos y el mantenimiento de la distancia social son algunos de ellos.
Son medidas imprescindibles para proteger nuestra salud y para evitar todo lo posible la propagación del virus. Sin embargo, no quiere decir que sean medidas inocuas y que no puedan causar efectos secundarios. En este sentido el uso continuado de las mascarillas puede causar problemas, como por ejemplo dolores de cabeza. Os contamos por qué.
1Estudio de la Universidad Extremeña a profesionales de la salud
Un estudio de la Universidad extremeña se centra en las consecuencias del uso continuado de las mascarillas entre el personal sanitario. Ya se contaba con datos que relacionaban su uso con los dolores de cabeza. Debemos tener presente que se trata de jornadas de ocho horas en las que el trabajo se realiza de manera continuada con las mascarilla puesta.
Una circunstancia que ahora mismo también podemos hacer extensible a otros trabajos, especialmente los que están relacionados con la atención directa al público.
