Ictus, la enfermedad contra el reloj

 

En poco más de lo que usted tarda en leer este post, se produce un nuevo ictus en España. En suma, unos 120.000 nuevos casos a lo largo del año. Es la primera causa de mortalidad en las mujeres españolas y la segunda entre los varones. En Europa la cifra alcanza los 650.000 fallecimientos anualmente.

Pese a ser una enfermedad ampliamente divulgada y bastante conocida por la población, merece la pena insistir en conceptos básicos como los factores de riesgo de padecer un ictus. Si bien los jóvenes no están exentos, la tendencia aumenta con la edad, afectando con mayor frecuencia a partir de los 55 años. También influyen las patologías asociadas como la hipertensión, diabetes, obesidad u otras enfermedades cardíacas, además del estilo de vida como el tabaquismo, sedentarismo o consumo excesivo de alcohol, entre las principales causas. 

¿Qué es un ictus? Se trata de una enfermedad cerebro – vascular de aparición súbita que se produce por la disminución del flujo sanguíneo cerebral. La sangre no llega en la cantidad necesaria y, como consecuencia, las células nerviosas no reciben oxígeno, dejan de funcionar y producen algunos síntomas como: asimetría facial, alteración del habla, debilidad en cara, piernas y/o brazos; confusión, dificultad para hablar, para caminar y alteración de la visión.

La identificación inmediata de estos síntomas es crucial en la evolución del enfermo, ya que se ha demostrado que los pacientes tratados desde el primer momento logran una recuperación casi total o con muy pocas secuelas. Esto se puede lograr con el control de los factores de riesgo, la implementación de protocolos y actuaciones, y la aplicación del Código Ictus.

Podemos diferenciar los ictus en dos tipologías. El isquémico representa en torno al 80% de los casos y se debe a una obstrucción del flujo sanguíneo cerebral a causa de un coágulo que provoca la disminución del aporte sanguíneo. A pesar de ello, este cuadro no es letal como para provocar la muerte de las células de forma inmediata, ya que se mantienen con la irrigación de vasos colaterales que pueden mantenerse estables hasta un máximo de 4,5 – 6 horas, antes de provocar la muerte celular. De ahí la importancia de actuar rápidamente frente a un paciente con ictus.

El 20% restante de casos corresponden a ictus de tipo hemorrágico, y es el resultado de la rotura de un vaso sanguíneo que provoca un sangrado dentro del cerebro. En pocos minutos las células comienzan a morir. Entre sus causas se incluyen el aneurisma hemorrágico o una malformación arteriovenosa. 

¿Qué es el Código Ictus? Se trata del procedimiento de actuación sanitaria basado en el reconocimiento precoz de los signos y síntomas de un ictus de probable naturaleza isquémica, que busca priorizar los cuidados médicos y procurar el traslado inmediato por parte de los servicios de emergencia a un hospital con Unidad de Ictus, como HLA Universitario Moncloa. Por sus condiciones clínicas, el paciente puede beneficiarse en este centro de dos tipos de tratamiento: la trombólisis intravenosa, que consiste en destruir el trombo/coágulo mediante medicación, o bien, cuándo no se puede realizar este procedimiento, se procede a una trombectomía para la extracción del trombo. 

Es importante tener en cuenta que no todos los pacientes que sufren un accidente cerebrovascular serán catalogados como Código Ictus, para poder aplicar el tratamiento necesario y oportuno lo antes posible. Para ello, los profesionales contamos con escalas y diferentes parámetros a seguir que tienen en cuenta la vida basal de paciente (grado de autonomía habitual de la persona), el tiempo de aparición y duración de los síntomas, el grado de afectación neurológica que tiene en el momento, y que el origen sea isquémico y no hemorrágico. Por tanto, la prevención y la rápida respuesta del entorno son vitales para el buen trabajo profesional y la mejor respuesta del paciente.

 

Sobre HLA Grupo Hospitalario

El Grupo Hospitalario HLA es uno de los proveedores hospitalarios con mayor presencia en España, creado con el objetivo de proporcionar el acceso a una asistencia sanitaria de alto nivel.  

Está compuesto por 15 hospitales integrados con 35 centros médicos multiespecialidad  y una red de 41 unidades de referencia en tratamientos de última generación. Con 1300 plazas de hospitalización HLA es un referente en la atención hospitalaria y ambulatoria. Más de 36 años de experiencia y presencia en seis países configuran un modelo de atención que basa su filosofía en el trato humano, la excelencia, el liderazgo, la responsabilidad y la especialización.