Un estudio llevado a cabo por investigadores del Karolinska Institutet (Suecia), y publicado recientemente en la revista ‘Diabetologia’, ha señalado al como un factor de riesgo de desarrollar la diabetes tipo 2.
El trabajo ha utilizado una técnica llamada ‘Aleatorización mendeliana’ (MR), que usa la variación genética como un experimento natural para investigar las relaciones causales entre factores de riesgo potencialmente modificables.
Para identificar posibles factores de riesgo de diabetes tipo 2, los autores realizaron una revisión de metanálisis y artículos de revisión en la base de datos ‘PubMed’ y encontraron 1.360 artículos relevantes. Así, encontraron un total de 97 factores de riesgo que podrían investigarse mediante el método de RM.
Para la población del estudio, utilizaron datos a nivel de resumen del consorcio ‘DIAbetes Genetics Replication And Meta-analysis’ y, posteriormente, verificaron que estas posibles asociaciones causales podrían replicarse en una población independiente separada, utilizando el consorcio ‘FinnGen’.
Así, los expertos encontraron evidencia de asociaciones causales entre 34 exposiciones (19 factores de riesgo y 15 factores de protección) y diabetes tipo 2. De hecho, el insomnio se identificó como un factor de riesgo novedoso, ya que las personas con insomnio tenían un 17 por ciento más de probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 que las que no lo tenían.
Los otros 18 factores de riesgo para la diabetes tipo 2 fueron depresión, presión arterial sistólica, comenzar a fumar, fumar de por vida, consumo de café (cafeína), niveles en plasma sanguíneo de los aminoácidos isoleucina, valina y leucina, enzima hepática alanina aminotransferasa (un signo de función hepática), índice de masa corporal (IMC) en la niñez y la edad adulta, porcentaje de grasa corporal, masa grasa visceral (interna), frecuencia cardiaca en reposo y niveles en plasma sanguíneo de cuatro ácidos grasos.
Las 15 exposiciones asociadas con un menor riesgo de diabetes tipo 2 fueron alanina plasmática (un aminoácido), lipoproteínas de alta densidad (colesterol bueno) y colesterol total, edad al inicio de la pubertad en las mujeres (menarca), niveles de testosterona, niveles de globulina transportadora de hormonas sexuales (ajustado por IMC), peso al nacer, estatura en la edad adulta, masa corporal magra (para mujeres), cuatro ácidos grasos plasmáticos, vitamina D circulante y años de educación.
«Nuestro estudio confirmó varios factores de riesgo previamente establecidos e identificó nuevos factores de riesgo potenciales para la diabetes tipo 2 utilizando los últimos datos resumidos. Los hallazgos deben informar las políticas de salud pública para la prevención primaria de la diabetes tipo 2. Las estrategias de prevención deben ser construido desde múltiples perspectivas, tales como reducir la obesidad y las tasas y niveles de tabaquismo, y mejorar la salud mental», han zanjado los expertos.