España lidera en la UE el reciclaje en residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) frente a la media europea, ya que se sitúa 8.2 puntos porcentuales por encima de esta, según datos de 2018, según datos de Fundación Recyclia.
Recyclia señala así que en 2018 el objetivo de recogida era de 347.800 toneladas y que este se cubrió en un 92 por ciento, lo que supone un incremento del 16 por ciento respecto al año anterior.
Los datos forman parte del I Informe Anual Recyclia sobre ‘Tendencias en la industria del reciclaje de RAEE y pilas en España’, que se ha presentado este jueves en Madrid. En la presentación ha participado la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, así como el presidente de Recyclia, Luis Pérez, y el consejero delegado de la compañía, José Pérez.
El informe refleja además que en España en el año 2019 se pusieron en el mercado un 25 por ciento más de toneladas de aparatos electrónicos y eléctricos que el año anterior y se fijó un objetivo mínimo de recogida separada de los correspondientes residuos equivalente a 9,22 kilogramos por habitante.
Respecto a la cantidad de pilas, acumuladores y baterías introducidas en el mercado español se superó las 128 kilotoneladas en 2019.
EL RECICLAJE DE RAEE Y PILAS GENERA EL 0,8% DEL PIB
Según ha explicado Luis Pérez, el sector del RAEE genera anualmente un Valor Añadido Bruto (VAB) de 955 millones de euros en España, lo que equivale al 0,8 por ciento del Producto Interior Bruto(PIB). De igual manera, ha resaltado que esta actividad genera y mantiene más de 16.500 puestos de trabajo, ya sea de manera directa o indirecta, y contribuye con más de 150 millones de euros a las arcas públicas.
El informe concluye que por volumen de toneladas gestionadas, la aportación al VAB y al empleo del reciclaje de RAEE y pilas es diez veces superior al del resto de industrias de gestión de residuos de nuestro país, debido al mayor valor relativo de los materiales contenidos en los aparatos electrónicos y las pilas, y a la complejidad y sofisticación de sus procesos de tratamiento.
Para apoyar la transición e implantación de la economía circular es fundamental una mejor comprensión de los flujos de residuos de aparatos RAEE, así como de su gestión. Solo así seremos capaces de aprovechar las oportunidades de implantar el modelo de producción sostenible y reducir el desperdicio de materias primas, agua y energía», ha subrayado el presidente de Recyclia.
Por su parte, el consejero delegado, José Pérez, ha detallado que el informe consta de cuatro partes «fundamentales». La primera de ellas identifica la cadena de valor del reciclaje; la segunda analiza la cantidad de residuos de RAEE y pilas a partir de la cantidad de productos de este tipo que existen en el mercado para poder cuantificar el impacto del reciclaje en la economía del país.
«Como último eje del informe hemos desarrollado la contribución del reciclaje a la modernización de nuestra actividad económica y hemos definido una serie de oportunidades que pueden reforzar la capacidad competitiva de la industria», ha asegurado José Pérez.
Alguno de los ámbitos en los que el sector trabaja, según ha explicado la consultora Ana Domínguez de la Escuela de Finanzas (AFI), están relacionados con el impulso al empleo verde, fortalecer los sistemas de información y coordinación interterritorial, mejorar ciertos mecanismos de recogida de residuos o realizar campañas de sensibilización en materias de reciclaje de RAEE y pilas.
El acto ha sido clausurado on-line por la ministra Maroto que ha elogiado el informe por llegar en un momento «oportuno» para definir un modelo que aborde la reconstrucción socioeconómica tras la pandemia.
«La industria del reciclaje genera empleo, promueve la innovación y refuerza nuestra competitividad industrial. Espero que esto sirva para modernizar y hacer crecer el país hacia un futuro más sostenible», ha concluido la ministra.