La grave situación que vive el Real Madrid tiene a Zinedine Zidane contra las cuerdas. El francés es y será una leyenda dentre del club blanco, pero no cabe dudas de que justo en este momento no ha conseguido que el equipo salga del bache que lo tiene jugando tan mal y consiguiendo pésimos resultados. Todas las miradas están puestas en las tres finales que se le avecinan al estratega galo y sus jugadores; porque si no logra salir con vida de los juegos contra Sevilla, Borussia Mönchengladbach y Atlético de Madrid, pues será la ocasión para el que Florentino Pérez tome una decisión o sea el mismo técnico el que de un paso al costado.
Si bien los jugadores del Real Madrid están a muerte con el francés, la realidad es que podrían tener un nuevo entrenador dentro de muy poco y ahora los máximos candidatos son dos: Mauricio Pochettino y Raúl González. Aunque han sonado varios nombres para dirigir a la escuadra capitalina, son el argentino y el español los mejores posicionados; sin embargo, ambos tiene cosas buenas y malas que le aportarían al equipo justo ahora. El cambio está por venir y solo uno de ellos puede obtener el puesto, la cosa es que los dos cuentan con aspectos tanto bueno como malos para tomar el cargo.
1Raúl y lo que le aportaría al Real Madrid
Entre las cosas buenas que tendría la llegada de Raúl Gonzalez, una de las más importantes sería que conoce a la perfección el club. Su entrada al vestuario sería más que bien vista por los jugadores que esperarían que le diera continuidad a las cosas buenas que dejaría Zidane y que hiciera los cambios justos para tratar de reconducir la situación. Además, el hecho de que haya sido capitán del Madrid le otorga un aura especial y que haya pasado por varias de estas crisis como jugador de la casa lo hará saber como se siente el vestuario; así podrá ayudar a los futbolistas a salir del bache de la mejor forma posible.
Otro de los aspectos que le puede aportar Raul al Real Madrid sería continuar el ejemplo que dejó el francés. Zidane también llegó en al misma situación en el 2016 y la fórmula funcionó muy bien: de no pelear en LaLiga y de verse en una situación complicada en Champions League, el entrenador galo dio paso a la primera de sus tres Copas de Europa consecutivas y logró remontar en el torneo local al punto de pelear hasta la última jornada. El actual técnico del Castilla seguiría el mismo patrón y esperaría darle ese impulso a los jugadores que en su momento les dio Zidane para así tratar de emular los éxitos.