El tenis es un deporte muy exigente y competitivo que requiere la máxima concentración y profesionalismo de los jugadores si es que estos quieren mantenerse en la élite durante la mayor cantidad de tiempo posible. Sin embargo, cuando los años van pasando, pues las dificultades aumentan, por lo que muchos deciden dar un paso al costado obedeciendo lo que sus cuerpos le pide; pero también hay otros que tienen una fuerza física y mental superior al resto de mortales, por lo que es muy difícil determinar cuando será el momento de su adiós. En esa extraña especie se encuentra un tal Rafael Nadal que sigue asombrando a todo el mundo.
Para el balear no existen imposibles y ante todo pronóstico logró conquistar su Roland Garros número 13, que le permitió igualar a Roger Federer con 20 trofeos de Grand Slam. Nadal sigue escribiendo páginas importantes en la historia del deporte en general, por eso es considerado por muchos como el mejor deportista español de todos los tiempos; no obstante, los años pasan y pese a todo el mallorquín alega que no le teme al retiro, más bien opina que hay cosas más importantes que evaluar.
En una entrevista para el medio ‘El Periódico’, Nadal abordó de llenó el tema de su retirada como profesional y no escondió que sea algo preocupante para él; pero en lugar de tomarlo como el fin del mundo o de que debe esforzarse más por ganar todos los títulos posibles, el español considera que más importante que todo eso lo mejor es ser recordado «como una buena persona».
Nadal es definitivamente un tipo increíble
Sin ningún tipo de duda para Nadal es determinante lograr victorias y títulos. Ahora mismo entrena para afrontar de la mejor forma el Masters 1000 de París, uno de los torneos que aún no ha ganado; aunque al final, el español dejó más que claro que lo mejor era que todos lo vieran como un ejemplo a seguir.
«Tengo muy claro que es más importante el tema personal que profesional. Ante todo, me gustaría que se me recordase como una buena persona, buena gente, más que como un gran campeón. Las victorias acaban siendo momentos de euforia y de felicidad, pero todo ese éxito acaba siendo pasajero. Lo importante es que la opinión que la gente tenga sobre ti sea buena», explicó Nadal que ya con esas palabras es más que seguro que enloqueció a sus admiradores que lo ven como una persona íntegra.
Para el adiós todavía falta
Pese a que se habló de su preferencia a la hora en que dijera adiós al tenis, con respecto su legado, Nadal no dudo en agregar que si bien sabía que el momento tendría que llegar, aún no se ponía una fecha límite. «No soy capaz de adivinar el día de mi retirada, todavía no. Quizás sea en un año, pero no puedo programar el futuro. A día de hoy lo veo casi imposible, pero uno debe estar preparado para todo lo que puede pasar», señaló.
Al igual que otros grandes, como por ejemplo Murray, el mallorquín acotó que su deseo pasaba más de los títulos que pudiera cosechar, porque en realidad lo que le importaba era poder demostrar que es competitivo y que disfruta del juego. Nadal especificó que el miedo no existía y que su marcha se daría cuando dejara de sentir esas dos cosas.
«No tengo miedo a ese día, así que no me lo planteo aún. Yo lo sentiré y sabré cuál es el momento de retirarme. Lo sabré cuando no sienta esa pasión que me mueve cada mañana, esos objetivos que me pongo para mejorar de forma continua… cuando eso ocurra, será el momento de pensar en dejarlo», concluyó un Nadal que definitivamente es un grande en todos los aspectos.