Dentro del Real Madrid las cosas están muy definidas para esta temporada que recién acaba de comenzar. Los mismos de la campaña pasada son los que batallarán para conseguir un nuevo éxito dentro del campeonato español, pero sin que una sola cosa haya cambiado en los planes del técnico Zinedine Zidane: Mariano Díaz no cuenta para nada en el esquema del equipo. Pese a sus esfuerzos, el hispano-dominicano no termina de entrar en la órbita del técnico francés; sin embargo, eso sigue sin ser una razón suficiente para que el delantero se rinda.
Uno de los dichos más populares dice que si la vida te da limones, pues haz limonada. Eso justamente es lo que quiere hacer el delantero tras volver y recuperarse de la reciente operación de amigdalitis a la que se sometió. La cosa es que tras esa intervención, el canterano regresó con ocho kilos menos; por lo que quiere aprovechar esa bajada de peso para ponerse en forma y ganarse de una vez por todas el favor de Zidane.
Un problema menos en la lista de Mariano
Ciertamente la suerte no le ha sonreído mucho al delantero. Y es que Mariano logró superar el Covid-19 sin problemas aparentes, pero al seguir molestándole la garganta se decidió junto al club que lo mejor sería que pasara por el quirófano para resolver de una vez por todas ese problema que tenía que las amígdalas y que siempre le impedía entrenarse con todo. Tras superar el trago amargo de la operación, lo peor fue enfrentarse a 10 días sin poder comer sólidos, lo que le llevó a perder esos ocho kilos y estar a cinco kilos de su peso ideal. Ahora deberá trabajar a destajo para recuperar esa forma que perdió, pero en él no será problema.
En las imágenes que proporcionó el club se ve, sobre todo en las piernas, que el atacante si perdió masa muscular importante. Además en los vídeos se le ve sofocado corriendo al hacer los ejercicios junto al preparador Grégory Dupont. No obstante, a pesar de todos los inconvenientes que surgen, el artillero no duda de que con su empeño puede volver a gozar de una oportunidad más de Zidane, como esa que tuvo en el Clásico ante el Barcelona y en la que pudo marcar.
Luego de ese partido llegó a ver minutos como revulsivo en la derrota ante el Betis, pero tras ese partido llegó el parón por la pandemia del coronavirus y todas sus esperanzas se difuminaron. Al regresar perdió el fuelle que había ganado y luego obtuvo solo minutos basura por parte del estratega francés. Con ese panorama muchos pensarían que se marcharía, pero Mariano se quedó por dos razones: no perder ese sueldo de cuatro millones de euros que tiene y sus ganas de triunfar de blanco.
Convencido de que su futuro pasa por el Madrid
Para Mariano la clave es nunca rendirse y en eso ha vuelto a enfocarse una vez más. Si bien tuvo algunas ofertas para salir durante este mercado de verano, la más importante fue la del Benfica; el hispano-dominicano se negó a rebajarse su ficha y se quedó en el conjunto merengue. Las críticas no se hicieron esperar, pero es que la mente del delantero todavía hay esperanzas de triunfar.
La salida de Borja Mayoral, la poca adaptación que Jovic a lo que pide Zidane y los cambios de sistema tácticos que está usando esta temporada, son la gran baza del atacante para asegurar que su oportunidad puede llegar en cualquier momento. Ahora aprovechará el parón por las selecciones para trabajar ante la mirada del francés, que no tendrá mucho que ver con la mayoría de internacionales fuera; y además, luchará por volver a ese peso y masa muscular ideal. Si se quedó es para pelear y con muchas ganas tratará de meterse de nuevo en los planes del entrenador galo, porque si ya lo hizo una vez, nadie le quita que pueda hacerlo una segunda.