Uno de los productos más habituales para la limpieza es el vinagre. Además de como aderezo de ensaladas, el vinagre también sirve para utilizar como desinfectante. Pero no es vinagre normal. El vinagre utilizado para la limpieza es destilado. Tiene muchas ventajas con respecto a otros productos. El primero de ellos es que es orgánico. No tiene componentes externos. Tampoco es tóxico. Y, sobre todo, es un producto barato y muy económico.
El vinagre es un producto que ofrece una limpieza natural inmejorable. Elimina bacterias, desinfecta las superficies y acaba con la suciedad. Es ideal para descalcificar tuberías debido a que el ácido que lo compone reacciona con las manchas y las disuelve. Sin embargo, vamos a decirte algunos lugares en donde no lo debes utiliza porque, igual que ese ácido corroe las manchas, también puede acabar con algunas superficies. Estos son los lugares a los que no deberías ni acercar el vinagre.
1Encimeras de piedra
A día de hoy es complicado encontrar encimeras de piedra de verdad. Todas las cocinas montan materiales más baratos y que pasan por piedras. Desde encimeras con aspecto de granito hasta otras mezclas.
Sin embargo, si tienes una cocina antigua y las superficies de las encimeras son de piedra natural como el mármol, el granito o la estealita, ten cuidado con el vinagre. En caso de que caiga, debe limpiarse rápidamente.
El vinagre puede llegar a dañar estas superficies. Al caer sobre ellas puede comerse el brillo e incluso puede dejar marcas sobre él. Para limpiar estas superficies sin vinagre, usa un trapo húmedo y jabón.