Las fotos que verás en este artículo son el resultado de la falta de conciencia por parte de los seres humanos. Acciones que terminan afectando el bienestar, la salud y la tranquilidad del individuo. No es algo fortuito que en la actualidad hayan más personas enfermas a pesar de los avances, mayores cambios climáticos y que la naturaleza no sea tan tierna y pura como sí lo era antes. Las personas al actuar sin pensar, desde ese punto, ya están perdidas. Lamentablemente somos todos los culpables.
No es un texto para transformar la mente de alguien. Esa educación que recibimos de pequeños de no botar basura en la calle, respetar el espacio de los animales, dividir la basura, no desperdiciar los recursos naturales era por algo. Había una razón detrás de esas grandes verdades. Ahora vemos un planeta caerse a pedazos y preguntamos ¿por qué?
Si existe la sensación de sentirte regañado o señalado por estas palabras, no hay razón. Más que una exhortación al cambio es un regaño para todos los seres humanos, incluyéndome. El ser humano tiene la facultad de pensar, de razonar; habilidad que lo convierte en alguien superior delante de otras especies. Cuando se observa la realidad actual: guerras, mendicidad, enfermos, hambruna y coronavirus es necesario decir ¿qué poco pensó el individuo de ayer y el individuo de hoy.
Las fotos que verás puede que ocasione un impacto en ti y solo por eso debes verlas
Un hombre surfeando entre desechos
En la foto se observa a un hombre dentro de una ola, una proeza que sería perfecta si en su derredor no estuviera esa cantidad de desperdicios: puede que haya una bolsa de Doritos, el envoltorio de unas galletas, el pañal que le cambió una madre al bebé el mes pasado. Se estima que para el 2050 habrá más plástico que peces en el océano ¡nadaremos en nuestro propio excremento!
Un informe revelado en 2017 asegura que cada año llega al agua entre 4.8 y 12.7 toneladas de plástico. Los surfistas ya no tendrán una tabla para practicar la actividad sino la tabla que el carpintero desechó hace un mes atrás. España, por su parte, arroja porcentajes bajos de reciclaje. Se habla que más del 50% del plástico no se recicla, aunque sería muy irresponsable asegurarlo.
Los efectos de la deforestación en British Columbia, Canadá
La imagen nos muestra un panorama desolado en donde se ha destruido el recurso que mantiene al ser humano en equilibrio, los árboles, La FAO (Organización Mundial para la Agricultura y la Alimentación) aporta datos alarmantes como: entre los años 2000 y 2003 se han perdido unas 13 millones de hectáreas, equivaldría al tamaño de Costa Rica.
La foto de arriba no hace más que evocar tristeza y lástima por nosotros. El ser humano, la especia más inteligente del planeta.
Kowloon, China – ¿Cómo vivía el ser humano en esas condiciones?
La ciudad de Kowloon ya fue demolida en los años 90′. La razón se debe a su superpoblación. Si han visto los archivos de sus computadoras comprimidos, esos libritos de colores, así era la mejor conocida como la ciudad amurallada. En un espacio de 47 kilómetros cuadrados había 2.000.000 millones de seres humanos.
En una ciudad así no se puede vivir, pues todo sería engorroso, tardío y con un ambiente nada sano. Su población aumentó más durante la Segunda Guerra Mundial.
Ciudad de México, ¿filtro o contaminación?
La capa negra que ven en la foto no es producto de un filtro de Instagram. Tampoco es una neblina que te invita a dormir. Se trata de contaminación y pensar que al llegar el geógrafo Alexander von Humboldt a la zona en el siglo XX, exclamó con admiración que estaba pisando la tierra más transparente. En la actualidad sus cielos y nubes están ocultos.
Las autoridades han exhortado pasar el menor tiempo posible al aire libre. Los seres humanos menos afortunados se quejan de las sensaciones extrañas en la piel y en los ojos.
Puerto Príncipe, Haití
La foto solo muestra la fachada de la isla de Haití. El terremoto del 12 de enero de 2010 dejó a este país destrozado. Todos sabían que no iba a ser tarea fácil su reconstrucción. Edificaciones inseguras, barrios insalubres, dificultad para acceder a los servicios básicos siguen reinando en el país. Las estrategias a aplicar poco han servido para su avance. Lo lamentable de todo es que las cosas no eran muy distintas antes del terremoto.
Deforestación en Brasil
La foto muestra un desastre ocasionado por la mano del hombre como las antes descritas: la minería, tala ilegal, la ocupación ilegal de tierras son algunas de las causas de la deforestación que ha alcanzado niveles preocupantes. Un reciente informe del Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (INPE) reveló que las tierras arrasadas entre 2017 a 2018 fueron de 7. 900 kilómetros cuadrados. Lo comparan con cinco veces la ciudad de México. En la actualidad la extensión es de 9.572 Km2.
Foto sobre el plástico en la cadena alimenticia
Esta foto muestra lo que jamás se imaginó el ser humano. Trozos de plástico en la cadena alimenticia. El animal no discrimina lo que come, por lo que muchos objetos desconocidos entran a su organismo. La instantánea causa impacto, pero también da lástima. Se tiene la mala creencia que el plástico atraviesa el intestino de los animales sin causar daño. Sin embargo, estos pueden ser letales, mal nutren a la especie y en otros obstruye su garganta.
Como dato no menos interesante, El 75% de las tortugas bobas muertas en el Mediterráneo y que fueron analizadas contenían un tipo de plástico en su estómago. Esto se debe a que las tortugas confunden este tipo de basura con las medusas que sí forman parte de su dieta diaria.
En el ser humano está el poder de cambiar todo. Esta época de cuarentena es un buen espacio para reflexionar sobre las acciones que se realizan a diario. Se debe tener en cuenta que cada paso que se da, puede favorecer o llevar a la muerte a alguien más o a una especie distinta. Todo lo que rodea al ser humano está conectado y si no se reacciona a tiempo terminará por alcanzarlo. Lo nostálgico es que quizás nuestros hijos terminen por recibir las consecuencias.