La bicicleta eléctrica se puede definir como un vehículo de pedaleo asistido, el cual cuenta con un motor de batería que ayuda a las bicicletas a disminuir el esfuerzo que haces al pedalear. Hoy en día existen un montón de modelos, como por ejemplo lo son las de carrera, las BTT, las urbanas, las de paseo o las de niños. De igual manera se han fabricado una gran variedad de motores que se adaptan a cada uno de los modelos, los cuales varían de peso, autonomía o potencia.
Para elegir la mejor bicicleta eléctrica que se adapte a tus gustos y necesidades puedes analizar algunos de los siguientes puntos.
El modelo de bicicleta eléctrica
Para comenzar debes plantearte primero qué tipo de usos planeas darle. El terreno por el cual vayas a transitar será uno de los factores que debes tomar en cuenta al momento de comprar la bicicleta eléctrica, ya que el modelo urbano no cuenta con las mismas capacidades de manejo que un una bicicleta para campo. Es por ello que debes saber en qué terrenos vas a conducir tu bicicleta para que de esta forma no tengas ningún inconveniente al manejarla.
Los tipos de motor de cada bicicleta
Existen dos tipos de motores para una bicicleta eléctrica: los motores con escobillas y sin escobillas. El primer tipo de motor es más pesado además genera mucho ruido, aunque por otra parte son más económicos.
Mientras que los motores sin escobillas son más silenciosos y ligeros que su contraparte, que son un poco más costosos que los primeros. Lo único que poseen en común es que ninguno de los dos puede superar los 250W de potencian nomina, esto a causa de la normativa impuesta a estos vehículos.
La posición del motor
Este componente se pueden encontrar en la rueda trasera, la delantera o en el eje central de la bicicleta eléctrica. La función del motos es la de transmitirle fuerza a los pedales para que no tengas que esforzarte en pedalear.
- El motor ubicado en la rueda trasera cuenta con el beneficio de que le aporta estabilidad y comodidad a la bicicleta, pero termina sacrificando parte de su potencia por encontrarse en el eje que se encarga de transmitirle fuerza a los pedales.
- Por su parte, el motor en la parte delantera cuenta con el inconveniente de que al estar en esa posición le aporta más peso a esa zona, por lo que se corre el riesgo de que reciba algunos impactos. Además es más fácil que pierda estabilidad al conducir por superficies resbaladizas.
La suspensión
Esto dependerá de cada usuario, ya que la bicicleta tenga o no suspensión es decisión suya. La suspensión delantera junto a un amortiguador en la parte trasera hace que el manejo del vehículo sea mucho más cómodo, esto se debe a que mejoran la posición de tu espalda y al mismo tiempo disminuyen las vibraciones en las muñecas y los brazos. Lo malo es que estos elementos aumentan el precio de la bicicleta y pueden generar algunas averías.
El peso de la bicicleta eléctrica
Este factor es otro de los que debes tomar en cuenta al momento de elegir tu bicicleta. Lo cierto es que al igual que sucede con las bicicletas convencionales, entre menos sea el peso mayor será el costo del conjunto. Teniendo esto en cuenta debes analizar cuán importante son ese par de kilos extras.
Pero en caso de que no quieras gastar mucho dinero puedes invertir en algunos componentes en lugar de enfocarte en el peso. Al final del día es mejor contar con unos buenos frenos, los cuales son mucho más útiles, que en el cuadro de fibra de carbono.
Los frenos de la bicicleta eléctrica
Algunos modelos cuentan con frenos de disco mecánicos o hidráulicos, que si bien son los más extendidos en las bicicletas de montaña, también son usados por algunos modelos urbanos. Lo cierto es que si bien cumplen su función a la perfección, también son un poco más complejos al momento de realizarles mantenimiento y reparaciones, sin contar que son más costosos.
Sin embargo la mayoría de las bicicletas urbanas suelen usar frenos del tipo V-Brake, los cuales rozan la rueda para frenar. A diferencia de los frenos de disco, estos son más económicos y más fáciles de reparar así como de realizarles mantenimiento.
Las baterías, tiempo de carga y autonomía
Actualmente las baterías de las bicicletas eléctricas están fabricadas a base de litio, ya que a diferencia de los tipos de batería anteriores, el litio es un elemento más eficaz y duradero que además es liviano.
Por otra parte el tiempo de carga de las baterías suele oscilar las 3 horas para lograr una carga completa, aunque hoy en día se han desarrollado modelos que necesitan menos tiempo de recarga, aunque aún existen algunos que necesitan hasta 8 horas o hasta más.
Lo cierto es que esto varía según el modelo de la bicicleta eléctrica, esto se debe a que algunos factores como el peso de la bicicleta, el terreno, el nivel de carga así como las veces que se puede activar la batería.
Por lo que para esto se debe medir la capacidad de la batería, la cual se mide en W/h (Watios/hora) cuyo número es el resultado de la multiplicación entre el voltaje del sistema por los amperios de la batería. Generalmente la capacidad de las baterías suele ser de entre 300-400 Wh, con los cuales fácilmente se pueden alcanzar entre 40-60 km. Aunque existen algunos modelos que pueden alcanzar autonomías de hasta 100-150 km.