En muchos países se celebra el día del pedagogo. Son numerosas las ocasiones en las que este gremio se ha encontrado infravalorada. Su perfil profesional es uno de los más desconocidos de toda la rama educativa aunque son múltiples los cargos y trabajos que podemos desempeñar. Por lo que es muy importante que estos se hagan notar y escuchar. Pero ¿cuáles son exactamente sus funciones?
Para empezar, debemos comenzar definiendo qué es la pedagogía. Si nos ceñimos a la definición más tradicional, vemos que la pedagogía es la ciencia que estudia la metodología y las técnicas que se aplican a la enseñanza y a la educación. Aunque la principal particularidad de la pedagogía es que no se ciñe únicamente a la etapa escolar, sino que estudia la educación a lo largo de toda la vida. Por lo tanto, abarca desde la educación obligatoria hasta la educación para adultos.
Funciones de un pedagogo
Una de las principales funciones de un pedagogo es la de ayudar y orientar a los individuos a los que se ofrecen nuestros servicios aunque no únicamente nos referimos a la pedagogía escolar, sino que también pueden intervenir en la pedagogía social y la pedagogía en las empresas.
Estas son algunas de las principales funciones de un pedagogo en los campos descritos anteriormente: el diseño de proyectos educativos, donde la función de un pedagogo es la de plantear los objetivos del aprendizaje. Aquí, lo hace basándose en la normativa educativa vigente en ese momento.
Por otro lado, están los programas de apoyo educativo. En este caso, las funciones son las de adaptar los programas escolares a las necesidades particulares del alumnado. También está la formación del profesorado. Se puede realizar de manera general o bien adaptada a las necesidades de un centro escolar concreto, ayudando a los docentes del centro a solventar sus dudas y necesidades.
Más funciones
El diseño del material didáctico es otra de las funciones. Son una parte fundamental a la hora de dar clases y que el alumnado comprenda los contenidos, por lo que es esencial el papel de un pedagogo para asegurarse de un correcto diseño de los recursos educativos y de la adaptación de los mismos en los cursos en los que se va a presentar.
También estaría la formación ocupacional. La función de un pedagogo en este caso sería la de diseñar planes de formación profesional y ocupacional así como los programas que se llevarán a cabo y las evaluaciones que se elegirán.
La pedagogía empresarial sería otra de las funciones. Como hemos dicho anteriormente, las funciones de un pedagogo no son exclusivamente del ámbito educativo, sino que van más allá llegando incluso al ámbito empresarial. En este caso, la labor de un pedagogo es la de planificar la formación, detectar la necesidades formativas en determinados departamentos así como la impartición de sesiones. La pedagogía del ocio sería una más. Aquí se puede incluir el ámbito deportivo o cualquier tipo de ocupación en el tiempo libre del individuo para que sea provechoso.
Por último, la orientación es una de las funciones del pedagogo más conocidas. Aquí, ayuda de esta forma al alumnado a escoger su futuro educativo partiendo de sus aspiraciones preferencias o necesidades.
Rol del pedagogo
A pesar de haber descrito estas funciones, hay muchas más. Por otro lado, son más los ámbitos en los que podemos encontrar o necesitar la figura de dicho profesional como en editoriales, centros penitenciarios, centros de día o residencia de ancianos, etc. En resumen, en cualquier lugar en el que se necesite la mejora de un programa formativo ya sea tanto en educación formal como en educación no formal.
Aunque son múltiples los ámbitos en los que se puede desenvolver un pedagogo, aún es un rol muy desconocido e infravalorado, lo que hace que se haya creado en muchos países un día destinado a ellos para reivindicar la importancia de su papel en educación, esperemos que con el paso de los años el papel y las funciones de un pedagogo tengan el reconocimiento que se merecen en educación.
Talleres pedagógicos
Hay muchos procesos de aprendizaje que se facilitan a través del juego, creando un ambiente idóneo, donde el niño sea el protagonista y el objetivo del juego persiga un fin pedagógico. En los centros pedagógicos, se crean talleres específicos que facilitan y fomentan el aprendizaje concreto.
Con esto, lo que se consigue es el desarrollo del niño en un ámbito específico, como la lectoescritura, la motricidad fina, la resolución de conflictos, la creatividad, la socialización, etc.
Problemas en niños
Los problemas o trastornos de aprendizaje o del desarrollo son un grupo de trastornos relacionados e implicados en el aprendizaje y desarrollo que suelen confundirse entre sí. Se estima que entre un 10 y un 15% de la población escolar tiene algún tipo de trastorno en el aprendizaje.
Estos problemas siempre han existido, pero por suerte los últimos avances de la neurociencia han permitido profundizar en cada caso, conociendo con mayor exactitud estos trastornos, y permitiendo a los profesionales no solo una mejor intervención, sino una temprana detección. Esta pronta identificación permite actuar antes y con ello mejorar los resultados.