Nuevas supuestas víctimas de Jorge Ignacio P.J., en prisión por la muerte de la joven Marta Calvo, han explicado este martes en el Juzgado de Instrucción número 20 de Valencia que el acusado, a quien conocieron a través de una página web, les introdujo cocaína en los genitales mientras mantenían relaciones sexuales y llegaron a perder la conciencia.
Estas mujeres han comparecido hoy en el juzgado después de que hace unas semanas otras dos víctimas también lo hicieran y relataran que Jorge Ignacio les había introducido droga en los genitales «a escondidas», de forma «sorpresiva», «traicionera» y sin su consentimiento, en un modus operandi que aseguraron que les provocó mucho miedo.
En esta ocasión, otras cuatro mujeres han ratificado al juez lo que ya declararon ante la Guardia Civil y han confirmado que el acusado, que en su día reconoció la muerte de Marta Calvo en un episodio de droga y relaciones sexuales y que posteriormente la descuartizó, actuó con el mismo modus operandi.
Las víctimas han explicado que Jorge Ignacio les servía una bebida en una copa, tras ello se sentían mareadas e indispuestas y, posteriormente, mantenían relaciones. Han asegurado que no tenían conocimiento ni dieron su consentimiento para que el acusado les metiera la cocaína en el cuerpo y se enteraban de ello cuando se despertaban, puesto que hasta tras de las mujeres han relatado que llegado a quedar inconscientes.
El Juzgado de Instrucción número 20 mantiene el procedimiento contra el acusado por jurado popular en relación, en este momento y sin perjuicio de ulterior calificación, por dos delitos de homicidio/asesinato consumado; tres delito de homicidio en grado de tentativa; un delito de omisión del deber de socorro; un delito contra la integridad moral/lesiones; contra la salud pública; un delito de profanación de cadáveres y otro de agresión sexual.
A Jorge Ignacio se le atribuye la muerte de Marta Calvo, cuyo rastro se perdió en noviembre de 2019 en Manuel; la de Arliene, que ejercía la prostitución y falleció en marzo de 2019 tras varios días en coma inducido en un hospital de Valencia –el asunto fue archivado provisionalmente tras revelar la autopsia que había muerto por un ataque epiléptico con consumo de droga– y la de Lady Marcela, también prostituta, que apareció muerta en junio de ese año un domicilio en circunstancias similares.