El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha decidido apoyar la extensión durante 90 días de algunos de los programas de préstamo desplegados por la Reserva Federal en respuesta a la crisis provocada por la pandemia, mientras que ha determinado no prolongar más allá del próximo 31 de diciembre aquellos vinculados a la ley CARES, solicitando además el reembolso de 455.000 millones de dólares (383.285 millones de euros) en fondos sin usar.
«Yo participé personalmente en la redacción de la parte relevante de la legislación y creo que la intención del Congreso era que la autoridad para originar nuevos préstamos o comprar nuevos activos (ya sea directa o indirectamente) venza el 31 de diciembre de 2020″, sostiene el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, en una carta remitida al presidente de la Fed, Jerome Powell.
A este respecto, el secretario del Tesoro solicita que la Reserva Federal «devuelva los fondos no utilizados», lo que permitirá que el Congreso reasigne para otros usos los 455.000 millones de dólares (383.285 millones de euros).
Entre los programas que el Tesoro no apoya extender se incluyen dos planes de compra de deuda de empresas, varias facilidades de préstamo a medianas empresas, así como un programa de préstamo a gobiernos locales y otro de apoyo a valores respaldados por titulizaciones.
«En el improbable caso de que en el futuro sea necesario restablecer cualquiera de estas facilidades, la Reserva Federal puede solicitar la aprobación del secretario del Tesoro y, una vez aprobada, los programas pueden financiarse en la medida permitida por la legislación, o fondos adicionales asignados por el Congreso», añade.
Por otro lado, Mnuchin informa de la voluntad del Tesoro de extender por un periodo de 90 días adicionales la Facilidad de Financiamiento de Papeles Comerciales (CPFF), la Facilidad de Crédito para Distribuidores Primarios (PDCF), la Línea de Liquidez del Mercado Monetario(MMLF) y la Línea de Liquidez del Programa de Protección de Nóminas (PPPLF).