La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) ha advertido de la posible amenaza en el nuevo ciclo hidrológico si se impone un «ecologismo radical» frente al equilibrio entre el medio ambiente y la satisfacción de las demandas de agua que los regantes defienden y que, según aseguran son capaces de multiplicar casi por cinco veces la generación de riqueza del sector frente al secano.
En este sentido, el presidente de Fenacore, Andrés del Campo ha mostrado su preocupación por el «ecologismo radical» porque se centra exclusivamente en objetivos ambientales sin considerar ni evaluar los efectos sobre las demandas existentes, en estos momentos en los que se está elaborando la tercera fase de planificación hidrológica.
«Todas las actividades económicas necesitan agua, por lo que reducir la disponibilidad y las garantías perjudicará a la economía, el empleo y la ordenación del territorio. Por ello, debemos encontrar un equilibrio razonable que permita armonizar el buen estado de nuestras masas de agua con la satisfacción de las demandas», ha explicado Andrés del Campo.
En relación con esto, Fenacore ha recordado su colaboración en la fijación de caudales ecológicos en los planes hidrológicos de cuenca aprobados en los ciclos anteriores de planificación y su cooperación con los Organismos de Cuenca en favor de la recuperación de las masas de agua.
La institución defiende que el sector multiplica por 4,8 la generación de riqueza y por 4,5 la creación de empleo, en comparación con el secano. En este sentido, señala que el regadío ayuda al desarrollo de todo un conjunto de sectores económicos relacionados con el mismo, como las empresas de suministros y maquinaria agrícola o la agroindustria o transportes.
Además, también ha subrayado el papel que tiene el regadío en la lucha contra la despoblación de la España rural, tal y como se señala en la quinta alegación que han formulado a los Esquemas Provisionales de Temas Importantes del tercer Ciclo de Planificación, que son los documentos intermedios en el proceso de planificación y están sometidos a consulta pública hasta finales de esta semana.
Esta reivindicación se ha producido tras la petición al gobierno de incluir 5.200 millones de euros en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española para modernizar el millón de hectáreas que todavía quedan pendientes, alegando que estas obras casan «perfectamente» con los objetivos marcados por las autoridades comunitarias para conceder los fondos europeos.
En especial, a la hora de fijar la población en los pueblos y de cohesionar, vertebrar y ordenar el territorio, ya que genera una fuerte demanda de mano de obra y favorece la actividad comercial.
Por ello, la institución recalca que trece de las quince provincias que más población han perdido durante los últimos diez años son las que menos superficie regada tienen y entre las provincias que mantienen o crecen en población abundan las que cuentan con mayores proporciones de cultivos de regadío.
