Todos hemos oído hablar de la homeopatía. Sin embargo, ¿qué es? La homeopatía se define como un método terapéutico que se basa en la similitud. Esto significa que con sustancias que provocan síntomas en una persona sana, se puede curar una persona enferma. Se basa también en la potencialidad, es decir, que con una parte infinitesimal, se consiguen grandes resultados.
La homeopatía tiene su origen a finales del siglo XVIII. La inició Samuel Hahnemann (1775-1843). Era un médico alemán preocupado porque algunos tratamientos de su época, como sangrías o purgas, hacían sufrir a los pacientes.
Desde su inicio, la homeopatía es una terapia complementaria más dentro dela medicina, y que nace de ella, con unas bases complejas. Por eso es importante, si se quiere seguir un tratamiento homeopático, ponerse en manos de expertos. Y también es vital que los laboratorios responsables de la fabricación de estos medicamentos sean profesionales y se sometan a los mismos controles de calidad del resto de medicamentos. Este es el caso, por ejemplo, de Boiron: un laboratorio farmacéutico familiar independiente fundado en 1932 que desde entonces ha estado avanzando en homeopatía con constante estudio científico, fabricando medicamentos homeopáticos fiables y seguros que distribuyen en más de 80 países.
Además, existen páginas informativas de referencia en las que podemos introducirnos en el mundo de la homeopatía y conocer todas sus posibilidades.
Cuando es época de gripe, debemos tomar precauciones para no contagiarnos y tener las defensas lo mejor preparadas posible, es en estos casos cuando la homeopatía puede ayudarnos a aplacar sus efectos. Cuando tenemos esa sensación de malestar, escalofríos, dolor muscular, etc. es precisamente el momento adecuado para reducir su intensidad y aumentar la posibilidad de recuperarnos antes utilizando medicamentos homeopáticos.
¿Qué beneficios debemos conocer de la homeopatía?
1. Como hemos dicho, se basa en métodos naturales. Esto tiene muchos puntos a favor.
De los más importantes es que resulta apta para todos: niños, embarazadas, personas con enfermedades crónicas y otros tratamientos, personas de tercera edad, mujeres en lactancia, individuos sensibles o alérgicos, etc.
De la misma forma, son tratamientos que no crean adicciones ni tienen dramáticos efectos secundarios. Estos tratamientos se consideran no invasivos, por lo que las complicaciones del sistema digestivo por su ingesta desaparecen. No dejan toxicidad futura en el cuerpo.
2. Lo que estos tratamientos proponen es una defensa natural, por lo que el sistema inmune del individuo mejora.
Esto significa que el tratamiento homeopático no solo hace frente a la enfermedad que se está tratando, si no que logra una mayor resistencia inmunitaria y una mejora física general de la persona.
Se ha demostrado científicamente que, como consecuencia, la salud emocional mejora de una forma considerable. La emocionalidad y el cuerpo son complementarios que se retroalimentan el uno al otro, por lo que un mejor estado físico logra una mejora emocional, y esta a su vez una mejora física. Y así se entra en un bucle de positividad y mejoraría que es beneficioso para la persona desde cualquier ángulo que pueda mirarse.
3. Por los motivos anteriores, podemos considerar la homeopatía como parte de un estilo de vida saludable.
Preocuparnos por el bienestar de nuestro cuerpo, escucharlo y darle lo que necesita, siempre ha sido una fuente de beneficios. La homeopatía parte de un punto de vista holístico, es decir, que considera una parte como todo.
¿Remedio o placebo?
Mucho se ha comentado sobre el efecto placebo de la homeopatía. En muchos casos, no olvidemos, que los placebos son necesarios y que en ocasiones la misma persona tiene la capacidad de cura. Sin embargo, hay multitud de estudios que han demostrado la eficacia de la homeopatía.
No debemos dejar de resaltar que la homeopatía tiene una aplicación individualizada que tiene en cuenta a la persona. En cada caso se consideran sus estados físico, psicológico, emocional, así como sus circunstancias vitales.
En este sentido, la homeopatía va un paso más allá. Porque es individualizada y adaptada a cada paciente según sus necesidades. Por eso es imprescindible acudir a expertos que puedan hacer un estudio pormenorizado y que tengan una amplia experiencia que avalen su profesionalidad. Además, los expertos homeópatas no están en guerra con la medicina tradicional, sino que se presenta como una fuente de recursos complementaria que produce amplios beneficios para sus usuarios.
Otros usos de la homeopatía
La homeopatía está muy extendida para el bienestar y mejora de las personas, sin embargo, no debemos olvidar que cuenta con otras ramas como la homeopatía veterinaria o agrohomeopatía.
Como afirmó Paracelso, ya en el S. XV, “el médico debe ser el auxiliar de la naturaleza, no su enemigo”.