La borrasca profunda ‘Odette’ que marcó el tiempo desde el viernes al domingo, la semana comenzará con la llegada gradual del conocido veranillo de San Miguel -que se celebra el 29 de septiembre- y dejará un tiempo estable con un ascenso térmico generalizado que se extenderá a lo largo de la semana hasta que el fin de semana lleguen lluvias y vientos intensos, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Precisamente, esta semana, la predicción meteorológica coincidirá con el refranero popular que atribuye determinado ‘tiempo’ en ciertos días coincidentes con el santoral. De este modo, tras el veranillo de San Miguel, llegará el fin de semana un tiempo acorde con lo que se conoce también como el «cordonazo de San Francisco», según ha explicado el portavoz de la AEMET, Rubén del Campo.
En concreto, ha indicado que esta semana se inicia con temperaturas bajas, con heladas durante la madrugada, como los -2,6 grados centígrados (ºC) en el Puerto del Pico (Ávila) o -1,8ºC en Morón o Almazán (Soria). Por otro lado, en Molina de Aragón (Guadalajara) ha registrado -0,1ºC en la madrugada del lunes, lo que supone la temperatura más baja en septiembre desde 2006. En el noroesteo y en el centro oriental peninsular, los termómetros han marcado temperaturas durante la pasada madrugada del lunes que estuvieron entre 4 y 7 grados por debajo de lo normal. «Son valores más propios de mediados de noviembre que de finales de septiembre», ha destacado.
No obstante, el portavoz ha pronosticado que las temperaturas, tanto las diurnas como las nocturnas subirán y se disfrutará del «veranillo de San Miguel o del membrillo», que es un periodo «breve» de altas temperaturas conocido desde los antepasados.
De este modo, la semana estará marcada por una situación anticiclónica en la Península, con poca diferencia de presión entre distintas zonas y por tanto, con poco movimiento de aire, salvo algunas excepciones y con las nubes prácticamente desaparecidas, lo que dará lugar a un ascenso térmico.
Así, ha indicado que tanto el lunes como el martes predominarán los cielos poco nubosos o despejados en prácticamente todo el país, aunque el lunes aún habría nubosidad abundante por la mañana en el Cantábrico oriental y Pirineos, con lluvias débiles, que tenderán a remitir.
El martes prácticamente no lloverá en ningún punto de España excepto en el norte de las islas canarias de mayor relieve, donde los vientos alisios acumularán bastante nubosidad y donde también lloverá este lunes.
Además, el lunes aparecerán brumas y nieblas en el interior peninsular y el miércoles continuará la situación anticiclónica y, por tanto, se repetirán los cielos poco nubosos o despejados y también volverán a aparecer las brumas y nieblas matinales típicas de otoño que se disipan a media mañana.
Pero el ‘veranillo’ será breve puesto que el portavoz ha adelantado que ya el miércoles por la tarde se acercará un sistema frontal por el noroeste de la Península que ya ese mismo día por la tarde y hacia la noche dejará lluvias en Galicia y de forma más débil, en el oeste de Asturias y de la provincia de León.
En cuanto al viento, las jornadas del lunes al miércoles el viento soplará mucho más débil que el fin de semana pasado, aunque todavía habrá algunos intervalos de fuerte, sobre todo, tramontana en el nordeste peninsular y Baleares, aunque la tendencia es que los vientos vayan amainando.
Del Campo añade que sí se reforzará el viento de Levante, que soplará fuerte en el Estrecho y en el entorno del mar de Alborán.
Las temperaturas subirán estos días y llegarán a 30 o 32ºC en el valle del Guadalquivir, de modo que se hablará de temperaturas entre tres y cinco grados por encima de lo normal en el centro y en la mitad sur de la Península e incluso «algo por encima» de los cinco grados por encima de los valores climatológicos normales en Andalucía. Por su parte, en el tercio norte los termómetros estarán en torno a los valores normales e incluso serán algo más frescas en el Cantábrico.
A partir del jueves, el «veranillo de San Miguel dirá adiós de forma abrupta», ya que la situación cambiará «radicalmente» a consecuencia del paso, ese mismo día, del sistema frontal que ya empezaba a entrar el día anterior por Galicia.
Asimismo, tras esto se profundizará una borrasca en el norte de la Península Ibérica que afectará de lleno. Primero el jueves el sistema frontal dejará precipitaciones en Galicia en las comunidades cantábricas, norte de Castilla y León, y también en los entornos de los sistemas Central e Ibérico y en los Pirineos.
Ese día, el jueves, se producirá una bajada notable de las temperaturas, sobre todo en la mitad norte, donde el descenso puede ser de hasta ocho diez grados con respecto al día anterior. Por el contrario, los termómetros subirán en las comunidades bañadas por el Mediterráneo y también en el sur de Andalucía, dado que soplarán vientos del oeste y a estas zonas llegan recalentados.
Así, ha apuntado que mientras que en el interior de Murcia Alicante se superarán los 32ºC, en el interior del Cantábrico no se alcanzarán ni los 16 o 18ºC.
El jueves el viento soplará con intensidad en las comunidades cantábricas y ya el viernes y el fin de semana la posible profundización de la borrasca en el entorno del Cantábrico, en concreto en el mar Cantábrico podría provocar un temporal otoñal de viento y lluvias en amplias zonas de la Península, especialmente en Galicia y otros puntos del extremo norte, donde las precipitaciones podrán ser fuertes y persistentes.
El viento en general soplará de componente oeste y suroeste con rachas fuertes en amplias zonas de la Península y Baleares, especialmente en zonas litorales y de montaña, y las temperaturas, seguirán bajando y aparecerá de nuevo la nieve en zonas de montaña de la mitad norte, especialmente en la Cordillera Cantábrica, Pirineos y norte del sistema Ibérico.
«Pasaremos, pues del veranillo de San Miguel a una situación de tiempo desapacible con posibles fenómenos adversos, sobre todo debido a la lluvia y el viento, conocida tradicionalmente como el cordonazo de San Francisco, en alusión a San Francisco de Asís, cuya conmemoración se celebra el cuatro de octubre«, ha resumido.
Según la tradición, por esas fechas de principios de octubre solía tener lugar el primer temporal importante del otoño. Aunque esto no ha ocurrido siempre así, lo cierto es, según el portavoz, que «este año sí va a llegar fiel a su cita» el cordonazo de San Francisco si se cumplen los pronósticos.