¿Tienes una ducha o bañera y todavía no la tienes con mampara? Es el momento de que tomes una decisión y disfrutes de todos los beneficios que aportará a tu cuarto de baño una buena mampara. Pero a la hora de instalarla no tenemos que poner la primera que nos encontremos en el mercado, sino que hay que saber elegir adecuadamente para obtener unos buenos resultados. Para ayudarte a elegir la mejor mampara para tu baño, te vamos a dar una serie de consejos que seguro te serán de gran utilidad.
Tipos de mamparas
Lo primero que tenemos que mirar es que tipo de mampara encaja mejor con nuestras necesidades. Como podemos ver en ASEALIA, web experta en la venta de mamparas para cuartos de baño, hay diferentes opciones entre las que podemos elegir. Te vamos a mostrar las principales para que te sea más fácil elegir.
Mamparas corredoras: este tipo de mampara destaca por contar con un sistema de apertura horizontal que cuenta con guías tanto en la parte superior como en la parte inferior. Dentro de esta variedad de mampara podemos adquirir la mampara con diferentes tipos de puertas. Las mamparas de tres puertas suelen ser las más comunes, pero las de cuatro hojas también son una opción. En este último caso son dos hojas fijas y otras dos correderas. Normalmente se suelen instalar las mamparas en cuartos de baño que no son demasiado grandes, debido a que no quitan espacio al baño.
Mamparas abatibles: este tipo de mampara cuenta con una o varias puertas. Por regla general cuentan con bisagras en los extremos. El objetivo de las mismas es conseguir que la apertura sea sencilla y sobre todo esas bisagras también ayudan a conseguir sostener las puertas. Las mamparas suelen ser de muy buena calidad, ayudan a evitar que el agua salga al exterior con una gran eficacia y pueden ser una muy buena opción para las personas con movilidad reducida. Sobre todo si la instalamos en un plato de ducha sin altura.
Mamparas plegables: se puede decir que son bastante parecidas en estética a las correderas, ya que se deslizan para abrir y cerrar a través de guías superiores e inferiores. La principal diferencia de estas con las correderas es que son plegables, es decir, forman como una especie de acordeón. Es otra opción interesante para las personas que tengan un cuarto de baño pequeño y además cuenten con un acceso complicado o reducido.
¿Qué tipo de cristal adquirir?
La gran pregunta que te harás a la hora de adquirir una mampara es si adquirir una mampara con cristal acrílico o cristal tradicional.
Cristal acrílico: se puede decir que es el tipo de cristal que más se está comercializando a la hora de adquirir una mampara. Es un tipo de cristal que se relaciona siempre con la resistencia y la seguridad, de aquí que muchas personas directamente apuesten por esta alternativa. Se fabrican con aleación de polímeros de plástico. Eso sí, a pesar de la creencia, hay que dejar claro que no son tan resistentes como solemos pensar, de aquí que haya que usarlos con cuidado para evitar roturas. Por otra parte, suelen demandarse mucho también por el precio, debido a que normalmente suelen ser más económicos.
Cristal: a pesar de que en ocasiones se suele pensar que no son muy seguras, la verdad es que no es así. Las empresas hacen cristales de seguridad, lo que hace que sean más seguras de lo que parecen estas mamparas. Por supuesto, hay que añadir que son más elegantes, por lo que se suelen instalar principalmente en cuartos de baño que buscan elegancia y modernidad. Además, se ha demostrado que este tipo de cristal es muy resistente al paso del tiempo, por lo que merece la pena pagar la diferencia de precio si queremos que la mampara nos dure como nueva durante muchos años. A la hora de adquirir este tipo de mampara tenemos que tener en cuenta el grosor del cristal. Para tener la certeza de estar adquiriendo una buena mampara, se recomienda que el grosor sea de 6 a 8 mm. Si compras un grosor inferior, no vas a obtener buena seguridad y si compras de mayor grosor aumentarás el peso y la experiencia no será todo lo agradable que se busca.
Dentro de este rango también tenemos que elegir entre cristales templados o laminados. La ventaja del cristal templado es que suele ser bastante más resistente que el cristal normal.
Por otra parte, hay que dejar claro que las mamparas de cristal normalmente suelen ser fáciles de limpiar. Hay que eliminar la idea de que la cal hace fea la mampara. Normalmente vienen preparadas, por lo que su limpieza no resulta complicada.
Rodamientos
Otro de los apartados en los cuales nos tenemos que fijar y que en verdad no solemos mirar son los rodamientos. La apertura y cierre son muy importantes, sobre todo si apostamos por una mampara que apuesta por carriles. Personalmente te recomiendo que los rodamientos sean metálicos o de Nylon si queremos tener la certeza de adquirir la mejor mampara para nuestro cuarto de baño. Si no quieres disfrutar de una mala experiencia, te recomiendo que los rodamientos sean de plástico.
Medidas de la mampara
Por supuesto a la hora de adquirir nuestra mampara ideal es muy importante buscar una mampara adaptada a nuestras necesidades. Hay que tener en cuenta que no solo hay que medir el ancho, sino que también hay que tener en cuenta la altura. Es importante adquirir una mampara lo suficientemente alta para evitar que el agua pueda salir por la parte superior. Ten muy en cuenta ese dato sobre todo si la mampara la van a usar personas altas.
Diseño de la mampara
Para finalizar, cuando tenemos claro cuál es el tipo de mampara que queremos para nuestro cuarto de baño es el momento de elegir el diseño que mejor encaja con nuestras necesidades.
La decisión final ya dependerá de tus gustos y sobre todo del diseño del cuarto de baño. Busca una composición adecuada para que la mampara quede bien integrada y el diseño del baño sea lo más bonito posible.