El expresidente de la UEFA Michel Platini cree que la FIFA «no puede hacer la vista gorda» si se confirma que hubo corrupción para la elección de Catar como sede del Mundial de 2022, pero duda que su actual presidente, Gianni Infantino, tenga «la ética» para tomar una decisión de tal tamaño
«Es legítimo considerar que si la votación fue manipulada y hubo sobornos, la FIFA no puede hacer la vista gorda. Debes tener cierta autoridad moral para cuestionar un voto fraudulento e Infantino no tiene la altura ni la ética que un presidente de la FIFA debe tener para tomar tales decisiones», señaló Platini en una entrevista a ‘L’Illustré’ publicada este miércoles.
La justicia estadounidense está investigando las irregularidades en el proceso de adjudicación al país asiático de la Copa del Mundo y para el francés, que recordó que apostó por esta candidatura, advirtió parece que existen «pruebas irrefutables» de esta corrupción y que en ese caso «uno no debería jugar un Mundial contaminado por la ilegalidad».
El exfutbolista fue absuelto en mayo de 2018 por la justicia suiza de las acusaciones de pagos indebidos que le costaron una inhabilitación por parte de la FIFA de ocho años, reducida finalmente a cuatro. Sin embargo, el organismo le reclama ahora que devuelva aquellos polémicos dos millones de francos suizos que le dio a Joseph Blatter.
«¿Por qué la FIFA esperó tanto tiempo para pedirme que devuelva esta cantidad? Primero porque sabe que este pago fue perfectamente legítimo, validado por su presidente, su Comité Ejecutivo, la Comisión Financiera, el congreso anual y los auditores», indicó Platini.
«Esta solicitud de reembolso es la forma de Infantino de ocultar la verdad. Es un gran manipulador y es plenamente consciente de que esta es la única forma de mantener la duda sobre mí en la opinión pública. La justicia civil decidirá esta cuestión y esto pondrá fin a este debate», aseveró el exdirigente.
El francés tiene claro que fue «víctima de una conspiración» para evitar que accediese a la presidencia de la FIFA en 2016 «por una gran mayoría». «Todos lo saben. Infantino, que era mi secretario general en UEFA, lo sabía mejor que nadie. Sin embargo, como han revelado numerosos artículos de prensa, parece que se movió hábilmente para garantizar que me excluyeran de la carrera por la presidencia», relató.
En este sentido, recalca que el ahora presidente de la FIFA logró «acuerdos entre bambalinas» con diferentes personalidades como Michael Lauber, Fiscal General de la Confederación Suiza, Michael Lauber, o el jefe del servicio legal de la FIFA Marco Villiger, «amigo de la infancia de Infantino».
«El problema principal es que Lauber e Infantino piensan que son intocables y que están por encima de la ley», manifestó el excentrocampista en relación a las reuniones informales que ambos habrían mantenido y que serían ilegales.
«SÓLO DESEO QUE SE HAGA JUSTICIA, NO QUIERO REVANCHA O VENGANZA»
Por ello, opina que Lauber «es consciente de que ha cruzado la línea roja», mientras que Infantino «debería renunciar a su mandato». «Pero el problema es que se convirtió en presidente de la FIFA por una hábil combinación de circunstancias, como un oportunista, sin ninguna legitimidad particular. Por lo tanto, hará todo lo posible para conservar su puesto», avisó.
Finalmente, Platini sólo desea «que se haga justicia», tanto a nivel personal como para «la historia» del ente rector del fútbol mundial. «Mi enfoque no es de revancha ni venganza, mi única fuerza impulsora es mi deseo de justicia», afirmó.
«Si el resto de mi vida está relacionado con el fútbol o no, en última instancia, no es tan importante como la necesidad de establecer la verdad de una vez por todas. Y para eso, se necesita coraje, perseverancia y clarividencia. Espero sinceramente que los magistrados suizos responsables de manejar este caso tengan todas estas cualidades para que finalmente podamos pitar el final del partido con tranquilidad», sentenció.