Los hilos dentro del Real Madrid comienzan a moverse y Florentino Pérez ya planea un montón de salidas no solo con la intención de rejuvenecer y mejorar la plantilla; también lo hace para recolectar una buena cantidad de dinero que no obtendrá debido a la crisis generada por el coronavirus. La idea es salir de varios jugadores que no cuentan para Zidane y de los que puedan generar bastante dinero; es decir, que los Gareth Bale, James Rodríguez o Mariano tienen todas las papeletas para abandonar la entidad merengue, pero uno de los nombres que surgen últimamente es el de Isco Alarcón.
La dirigencia blanca valora que el precio del malagueño, que ronda unos 40 o 50 millones de euros, sería una cantidad muy buena. Sin embargo, existen dos condicionantes que evitarían una posible salida suya del conjunto blanco: la más crucial es que él se niega a salir y lo otra es que Zidane lo tiene entre sus hombres de confianza.
Isco está negado a escuchar ofertas
Tal como mencionan algunos medios, el mediocampista andaluz pidió a su padre y representante que no escuchara ninguna oferta; porque a pesar de no disputar tantos minutos esta temporada (1.620 minutos), confía plenamente en sus posibilidades de volver a ser importante nuevamente en el club. De hecho antes del confinamiento Isco venía jugando todos los partidos de titular, incluso fue el marcó el gol en la ida ante el Mancheter City, pero al regreso el francés lo tuvo mucho tiempo en el banquillo.
Tampoco tiene miedo a la competencia, porque aunque se dice que el Real Madrid no fichará y si saldrá de muchos jugadores, la competencia en su puesto si es muy dura; además, el regreso de un hombre como Martin Odegaard le puede restar aún más minutos. No obstante, gente allegada a él aseguró a ‘As’ que “está muy acostumbrado a disputar su puesto con cuatro o cinco compañeros y siempre ha terminado jugando”, por lo que asumirá el reto venga quien venga.
Zidane siempre le da minutos
Aunque jugar en el centro del campo del Madrid está muy caro, el malagueño siempre goza de oportunidades; más que nada por la confianza que siempre le da Zidane. El entrenador francés cree ciegamente en la calidad de Isco, por lo que lo ha puesto en la cancha en varios momentos importantes. Sin embargo, con tantos efectivos y con un esquema donde no se acomoda bien, el andaluz también tuvo que pasar varios tramos de la temporada viendo todo desde la grada, como se comprobó en la vuelta ante el City.
Con las dificultades que tiene, de lo único que no hay duda es que Isco es uno de los predilectos del técnico que en muchas ocasiones lo puso por encima de cracks como Bale o James Rodríguez. La fe que tiene en sí mismo es total y con un contrato que acaba en el 2022 no está apurado en clarificar su futuro, porque sabe que cuenta con tiempo tanto para buscar un nuevo destino como para ganarse una renovación, que es lo que realmente busca. Su calidad está fuera de toda duda y si bien varios futbolistas saldrán, el de Arroyo de la Miel ya dejó claro que se niega a integrar ese grupo que dirá adiós en este mercado.