El ex Director General del Málaga, el estadounidense Richard Shaheen, ha presentado una demanda por despido nulo ante el Juzgado de lo Social de la ciudad y acusa al Administrador Judicial del club andaluz, José María Muñoz Jiménez, de ser responsable de la «vulneración de sus derechos fundamentales».
El escrito de demanda recuerda que el ex director general fue despedido, según él, de forma ilegal el pasado mes de febrero. Además, Shaheen recalcó que «las acusaciones en las que se pretende basar este despido disciplinario que se llevó a cabo de manera urgente, son absolutamente genéricas y falsas, carecen de cualquier base, y se llevo a cabo sin la apertura de ningún expediente previo como exige la ley, lo que muestra otra acción ilegal más del Administrador Judicial».
Por ello, se le acusó de una conducta incorrecta no probada, que además de vulnerar su derecho a la defensa y a la igualdad de trato, contraviene, apuntó en un comunicado, «el principio de inocencia y afecta gravemente a su derecho al honor e imagen pública, tras más de 20 años de una carrera profesional inmaculada».
«Este despido responde única y exclusivamente a una represalia por la solicitud presentada para nombrar a Richard Shaheen como interventor que controlaría los poderes del Administrador Judicial. Con ese despido nulo por vulneración de los derechos fundamentales del Sr. Shaheen se evitaba que Shaheen ejerciera este papel de control», indica el comunicado.
Además, el entonces director general denunció haber recibido un «trato injusto» y que ha sido «represaliado» debido a la estrecha relación con el propietario del Málaga, Abdullah Al Thani, ya que ningún otro ejecutivo senior con poder para representar al club ha sido despedido, ni el director financiero, ni el abogado interno, entre otros, han sido apartados y continúan en el club.
Por todo ello, pide ser reincorporado en su puesto de trabajo, así como percibir los salarios desde la fecha de despido, el pasado febrero, y la correspondiente indemnización de daños y perjuicios por la vulneración de sus derechos fundamentales.
Shaheen consideró que este despido es el comienzo de una serie de actuaciones que podrían abocar al Málaga al agravamiento de su situación financiera, después de haber sido el primer equipo profesional en presentar un ERE, que afecta al menos a 50 trabajadores, «poniendo en peligro a sus familias y generando una fuerte incertidumbre en el equipo».
El ex Director General calificó de «totalmente irresponsable e imprudente» la gestión actual y pone como ejemplo la venta del delantero Antoñín al Granada CF por 1,5 millones de euros, recordó que ya existía un plan de viabilidad previo a la emergencia sanitaria de la COVID-19 y que todas esas medidas han sido «inexplicablemente paralizadas» por el administrador judicial.
En dicho plan para el mercado de verano se contemplaba, entre otros puntos la cesión o venta de algunos jugadores «con gran valor en el mercado» y que podrían suponer un ahorro al club de alrededor de 7,2 millones de euros y unos ingresos de 8,6 millones.