El piloto español de MotoGP, Jorge Lorenzo, quiere volver, pero su deseo, hasta ahora no se ha podido cumplir, pues Yamaha se niega a darle esa oportunidad para reeditar grandes gestar y abandonar la disciplina por la puerta grande. Lorenzo no ha contado con el respaldo de la escudería nipona, la cual le cierra las puertas.
Lorenzo anunció su retirada la temporada pasada, tras culminar en el puesto 19 al acumular solo 28 puntos con Hondas. Esto y ver a su compatriota Marc Márquez dominando la escena le motivó a decir adiós y buscar nuevos horizontes lejos de las pistas y el asfalto.
Tras su postura de abandonar el circuito, mallorquín de 33 años, ha visto la oportunidad de reiniciar su carrera con la Yamaha, pero la escudería que le firmó como piloto de pruebas no ha pensado en aprovechar su experiencia y palmarés para poder darle pelea a las motocicletas Hondas y a Marc Márquez.
El tres veces campeón de la categoría no quiere retirarse como lo hizo. En noviembre estaba cabreado por el poco apoyo mostrado por Honda y quería darse un descanso. Ahora siete meses después quiere una oportunidad, pero no consigue espacio, por lo menos para la atípica temporada del 2020, pues los italianos de Ducati han manifestado interés de contratarle como uno de sus pilotos para la campaña del año que viene.
La postura de Yamaha
Lin Jarvis, director general de Yamaha Racing, explica que su equipo no está del todo satisfecho por haber contratado a Lorenzo como piloto de pruebas. El ejecutivo afirma que toda esta situación con el coronavirus terminó afectando la temporada y de por sí también las probabilidades del mallorquín para lograr un hueco como piloto titular.
Es frustrante, no hay otra manera de describir cómo se ha desarrollado el año de Jorge. La epidemia ha traído consigo muchos aspectos frustrantes. Pero nuestros planes con Lorenzo se vieron gravemente afectados. Jorge pilotó dos días en Sepang, lo que en realidad fue sólo un ‘shakedown’ (calentamiento) para él. No hizo mucho por nosotros. Fue utilizado principalmente para acostumbrarlo a la moto y para ponerlo al día. Luego debería haber probado en Japón y en pistas europeas. Todo estaba bien planeado y tuvo que ser cancelado», dijo Jarvis.
Yamaha no tiene la certeza de volver a contar con Lorenzo en las pruebas de las nuevas motos para la actual temporada, ya que la situación sanitaria ha trastocado todos los planes que estaban previsto, por ello la escudería nipona no quiere comprometerse más con un piloto que merece mejor trato. Por ahora quieren esperar como se desarrollan las cosas antes de tomar decisión que al final beneficie a todos.
«Ahora hemos planeado un test en Misano a mediados de la temporada. Pero hasta ahora no sabemos si esta prueba tendrá lugar. E incluso si se lleva a cabo, será muy difícil para nosotros participar con Jorge. Porque nuestro equipo de pruebas está formado principalmente por ingenieros japoneses, pero, por el momento, no se les permite viajar a Europa. Es muy frustrante. Y la prohibición de las carreras como invitado significa que no tendremos la oportunidad de ver a Jorge en acción en una carrera este año. Es una pena. Teníamos expectativas muy altas con este nuevo proyecto. Pero por el momento no podemos continuar con eso», aseguró el director de la Yamaha Racing.