Quién le iba a decir a Pablo Iglesias e Irene Montero que sus vacaciones en compañía de sus hijos iban a terminar siendo un auténtico calvario. El destino elegido: un pueblo de Asturias llamado Felgueras; el resultado: vuelta a Madrid y un restaurante que lleva días soportando las amenazas e insultos por el hecho de haber atendido a la pareja.
Nos vamos hasta el restaurante Casa María para saber cómo es y poder dar respuesta al porqué la gente no quiere ir desde la visita de los líderes de Podemos, Pablo Iglesias e Irene Montero.
1Casa María, un restaurante de gran cocina asturiana
Casa María está en Felgueras (Asturias), un paraje acogedor, de esos a los que ya nos tiene acostumbrados Asturias. El restaurante Casa María ofrece una auténtica variedad de platos típicos asturianos. No podía faltar entre sus variedades gastronómicas la genuina fabada. Es un lugar ideal para ir con familiares y amigos y disfrutar de un gran día. Ofrece una amplia carta de vinos y un arsenal de postres tradicionales que te van a encantar. Por supuesto, no puedes olvidarte de la sidra. ¡Seguro que Pablo e Irene brindaron con un vasito de sidra recién escarciada!
Todo parecía marchar bien por el restaurante de María hasta que han llegado estos desagradables sucesos. ¡Todo por dar de comer a dos clientes! La cuestión es que esos dos comensales son dos personajes públicos pertenecientes a un partido político en concreto.
Si algo está claro es que la crisis sanitaria originada por la COVID-19 ha sacado lo mejor y lo peor de cada persona. Sin duda estamos ante una época complicada que requiere de mucha empatía por parte de todos los miembros de la sociedad. Como bien sabemos, esto es difícil y no siempre se consigue pero no podemos permitir que en los años que corren, tengamos que vivir altercados de este calibre y querer hundir un negocio familiar por el sencillo hecho de que dentro hayan estado dos políticos de una determinada ideología.
Si por algo se caracteriza este establecimiento es por su amabilidad, honradez y hospitalidad. A priori deberían ser tres factores claves que les hicieran ver, a las personas que ahora les quieren tirar por tierra el negocio, que independientemente de los ideales de cada uno, el respeto va por encima de todo. Te llames Pablo Iglesias o seas Irene Montero, tienes el mismo derecho de ir a los sitios que veas conveniente y pasar un rato agradable sin que nadie te genera un malestar, a ti y a todos los que te acompañan.