Manuel Marrero insiste en que si no se decreta la paralización de las obras “se puede estar cometiendo prevaricación”.
Anuncia varias iniciativas parlamentarias sobre la suspensión cautelar de las polémicas obras “que se están llevando a cabo de manera ilegal”.
“Hay responsables en todas las administraciones competentes de este flagrante incumplimiento de las leyes”.
Alberto Rodríguez denunciará esta tarde en el Congreso que se mantiene el atentado medioambiental en la playa de Granadilla de Abona.
El Grupo Parlamentario Si Podemos Canarias insta una vez más a los gobiernos del Estado y de Canarias a “decretar la suspensión cautelar de las obras ilegales que se están llevando a cabo en la playa de La Tejita en Granadilla de Abona”.
“La empresa que está construyendo el hotel lo hace de manera ilegal sobre terrenos afectados por una revisión de deslinde, y las administraciones competentes deben evitar que se continúe cometiendo un atentado medioambiental hasta que se resuelva judicial y administrativamente este asunto”, ha asegurado Manuel Marrero, portavoz parlamentario de Sí Podemos Canarias.
Marrero insiste en que “nos movilizaremos junto la ciudadanía organizada que, frente a la permisividad de las autoridades”, continúa luchando “mediante actos legales” para evitar que se construya un hotel en la playa de La Tejita, “uno de los pocos lugares vírgenes que van quedando en nuestras islas”.
“Desde hace años, hemos apoyado al colectivo ‘Salvar la Tejita’ en su oposición a que se construya un hotel y de nuevo es la ciudadanía la que tiene que defender con acciones legales los intereses del conjunto de la población”, afirma.
El portavoz, que adelanta que el Grupo Parlamentario Sí Podemos Canarias va a llevar de nuevo al Parlamento varias iniciativas para suspender las obras del hotel de La Tejita, asegura que “poco antes del estado de alarma, el propio consejero José Antonio Valbuena, a raíz de una comparecencia pedida por nuestro grupo parlamentario, reconoció que hay motivos más que suficientes para que, por parte de las administraciones competentes, se paralice de manera cautelar esa obra” en la citada playa de Granadilla de Abona.
Asimismo, Marrero recuerda que hace un año, justo después de las elecciones y en nombre del Grupo Parlamentario Sí Podemos Canarias (Podemos, Sí se puede y EQUO), presentó al Ayuntamiento de Granadilla de Abona, a la Guardia Civil del SEPRONA, a la Dirección General de Costas y a la Fiscalía de Medioambiente. un escrito de puesta en conocimiento de que continuaban las obras
Posible prevaricación
Junto a ello, y de forma coordinada, el diputado de Unidas Podemos por la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Alberto Rodríguez, presentó en el Congreso de los Diputados una batería de preguntas al entonces gobierno estatal en funciones con el fin de que “ninguna de las instituciones competentes pudiera mirar para otro lado, pues podrían cometer prevaricación”.
Precisamente, el propio Rodríguez intervendrá en la tarde de este martes, 16 de junio, en el Congreso para denunciar que se mantienen las polémicas obras.
Fruto de estas acciones llevadas a cabo por los responsables públicos de Sí Podemos Canarias en mayo de 2019, Marrero recuerda que “desde Costas se instó a la empresa a la paralización inmediata de las obras, dándole un plazo para reponer los daños causados, pero las mismas continuaron”.
Según Marrero, “Costas tendrá que comprobar el grado de cumplimiento de la orden dada, establecer las oportunas sanciones por su incumplimiento y establecer urgentemente el nuevo deslinde de la delimitación marítimo-terrestre”.
Además, asegura que “debe retirar urgentemente la valla que actualmente frena la formación de la duna” para que la naturaleza “reponga a su estado anterior el destrozo realizado durante estos meses”.
“Hay responsables en todas las administraciones implicadas de este flagrante incumplimiento de las leyes”, afirma.
Marrero insiste en que “el subdelegado del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife tiene toda la documentación” y recuerda que “las autoridades tienen la obligación de frenar cualquier atentado contra el medio ambiente, cualquier deterioro de un espacio natural protegido perteneciente al común de la ciudadanía”.
“Nosotras vamos a seguir diciendo que La Tejita no se toca”, concluye.