La portavoz del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Pepa Luzardo, ha mostrado este viernes su “preocupación” por los menores que tienen en el comedor escolar su único sustento alimenticio diario, tras haberse decretado desde hoy y durante 14 días el cierre de todos los centros educativos de las Islas.
Luzardo pide a Gobierno de Canarias y Ayuntamiento capitalino que ofrezcan una “alternativa urgente” a las familias que tienen servicio de comedor escolar y que con la suspensión de clases por Coronavirus se han quedado sin esa posibilidad.
“La suspensión de toda actividad escolar en Canarias siguiendo la recomendación del Ministerio de Sanidad no la cuestionamos, pero hay que prever las consecuencias sociales que eso tiene y tener prevista desde ya una alternativa”, asegura la ex alcaldesa, quien recuerda que en Las Palmas de Gran Canaria hay 3.086 niños de ‘cuota cero’.
“Esperamos que Gobierno y Ayuntamiento informen hoy mismo de las alternativas para las familias beneficiarias del comedor social en las escuelas”, agrega la edil popular, que afirma que el Gobierno Local del Ayuntamiento “conoce muy bien la importancia que tiene el comedor escolar para centenares de familias de nuestra ciudad”.
Por ello esperábamos “anticipación y capacidad de reacción inmediata”, añade Luzardo, dado que ya hoy esas familias no tendrán un servicio “que constituye el principal sustento alimenticio diario para muchos niños”.
Los antecedentes de Hidalgo y el PSOE con este asunto son “nefastos”, como se demostró el verano pasado en que pretendían dejar sin comedor durante la época estival bajo el poco presentable argumento de que era competencia del Gobierno de Canarias.
Por ese escaso impulso, en la capital de Canarias no se tuvo servicio de comedor escolar en verano hasta mediados de julio y encima fue tan escaso en esfuerzo de comunicación realizado, que muy pocas familias se enteraron, en concreto, 69 niños frente a los 395 de 2018.
“La sensibilidad de Hidalgo con los comedores escolares ya quedó en entredicho el pasado verano y vemos cómo ahora vuelve a demostrar una nula capacidad de reacción para las familias con mayores necesidades de nuestra ciudad”, concluye Pepa Luzardo.