Blacksad: Under The Skin supone el regreso de Péndulo Studios al mundo de los videojuegos. El estudio madrileño, famoso a finales de los 90 por éxitos como Hollywood Monsters o la saga Runaway, se pone al cargo de un trabajo difícil, llevar el cómic de Blacksad, de los también españoles Juan Díaz Canales y Juanjo Guarnido, a la consola y hacer de él una aventura gráfica pero no del estilo retro si no utilizando los cánones de la actualidad al más puro estilo Telltale. Como tercera pata de este banco nos encontramos a Meridiem Games, encargados de que nos llegue a nuestras manos.
Blacksad es un comic muy del estilo del cine negro americano de los 50 en el que tomamos el papel de John Blacksad, un detective cuya oficina se encuentra en una ciudad americana. La peculiaridad es que en el universo de Blacksad todos los personajes son animales con aspecto humano. La historia que se nos presenta nada tiene que ver con los cómics ya que el caso que debe investigar Blacksad, el gato negro, es una muerte en el contexto de un combate de boxeo en donde nada es lo que parece a simple vista.
Una buena historia que engancha desde el primer momento y que se va salpicando con sucesos secundarios que no le restan ni un ápice de fluidez, al contrario nos permiten desconectar un poco del caso para centrarnos en otras cosas.
En BlackSad tendremos que inspeccionar escenarios, hablar con todos los personajes posibles, buscar pistas y tomar decisiones. Blacksad es un personaje completamente moldeable desde el punto de vista de su personalidad. A lo largo del juego vamos a ir eligiendo opciones que irán repercutiendo en cómo va siendo el detective. Entre las opciones podremos hacerle más duro o más sensuble, resuelto a la toma de decisiones o más cauto, más honesto a la hora de decir las cosas o pragmático en sus opiniones, incluso si es más solitario o más romántico y algunas opciones más que preferimos que descubráis por vosotros mismos.
Toma prestado de otras aventuras los momentos en los que hay que usar los puños y pelear en escenas con tiempo limitado para pulsar el botón correcto y esquivar los golpes. Por ejemplo al inicio de la aventura un rinoceronte nos atacará y aquí se verá muy bien, a modo de tutorial, como funciona este modo. Por supuesto que además de estas escenas con tiempo podremos elegir si pegar de una manera o de otra y esto también influirá.
El timming también está introducido en las respuestas en las que deberemos elegir opción en un tiempo limitado en algunos momentos o incluso quedarnos callados. Algo que nos ha gustado mucho es que se ven por dónde van los tiros en las ocasiones cruciales, es decir, el juego no nos va a engañar y a envolver la verdad, si respondemos de una manera, tendremos claro que esta respuesta influirá sobre un hecho o incluso sobre un personaje. Podemos hacer que la historia vaya por un camino o por otro a partir de nuestras decisiones e incluso podemos llegar a tener en nuestras manos la vida de alguno de los personajes de Blacksad.
Además de hablar, como decíamos antes, Blacksad deberá también investigar los escenarios en busca de pistas, unas pistas que nos llevarán irremediablemente a tener una serie de ideas de cómo ha ido sucediendo los hechos. Aquí tenemos otro elemento heredado de otros juegos y que nos ha gustado bastante, las deducciones a partir de las pistas que nos harán avanzar en el guión si las vamos encadenando de manera correcta. Quizás la parte de la investigación del escenario no es todo lo amplia que se querría y se va haciendo algo monótona a medida que vamos avanzando pero de todas formas está muy bien implementada, sobretodo el sistema de deducciones que realmente nos hará sentirnos orgullosos de nosotros mismos cuando las vamos uniendo correctamente.
Una historia que nos llevará algo menos de 10 horas según lo que nos entretengamos a lo largo de los escenarios y que nos llevará a varios finales distintos según nuestras opciones seleccionadas. Además podremos ir encontrando ciertos coleccionables muy curiosos ya que son cromos de béisbol de los años 50 con los que completaremos un álbum.
Quizás los dos puntos flacos de Blacksad son su tosco movimiento del personaje y sus problemas gráficos, algo en lo que los desarrolladores ya están manos a la obra para solucionar. Aún así el juego se ve bastante bien y se asemeja mucho a lo que hemos visto en el cómic. La música está muy bien compuesta con un estilo de Jazz muy del tono de la novela negra que se nos representa en el juego. Si además sumamos que el juego viene traducido y doblado al español con un gran trabajo por parte de los actores, es la guinda del pastel del apartado sonoro.
Blacksad es una producción española que está a muy alto nivel con respecto a otros juegos aparecidos recientemente del mismo género de la aventura gráfica moderna. Cautiva por su apartado ambiental y por su música aunque es cierto que no está exento de un control muy poco pulido y de algún bug que te hace reiniciar desde el último punto de guardado. Péndulo Studios han realizado un gran trabajo de adaptación de un cómic exitoso y lo han llevado al mundo de los videojuegos de la mano de Meridiem Games. Es una aventura gráfica ideal para los aficionados al cómic de Blacksad pero aunque no lo conozcas también te va a enganchar. Dale una oportunidad al gato negro, que no vas a salir decepcionado.