El Real Madrid tuvo en su mano recuperar la autoridad perdida en el Santiago Bernabéu, en un partido en el que pudo golear gracias a la inspiración de Benzema que impulsó la mejoría en una primera mitad de gran fútbol, antes de pagar la relajación cuando puso su mente en el estreno en Liga de Campeones.
Necesitaba el Real Madrid un triunfo que le diese confianza, que fuese enterrando las dudas de una imagen que acercaban más al pasado que a un inicio ilusionante. Y lo firmó con una imagen impecable en el primer acto pero sin desterrar la intranquilidad en cuanto rebajó la intensidad en el segundo, cuando puso la mente en el inicio del camino de ‘Champions’ con la compleja visita al PSG.