El crecimiento de Gelabert en Gijón complica su continuidad
El Sporting de Gijón se enfrenta a una situación tan ilusionante como complicada. César Gelabert, el talentoso mediapunta cedido por el Toulouse FC, ha dado un salto de calidad notable en las últimas jornadas, convirtiéndose en la gran figura del equipo en este tramo final de temporada. Bajo la dirección de Asier Garitano, el futbolista palentino ha dejado atrás su rol discreto para asumir protagonismo con actuaciones determinantes. Su explosión futbolística ha sido tan evidente que ha elevado considerablemente su valor de mercado, lo que ahora complica los planes del club rojiblanco de cara al futuro inmediato.
Desde Toulouse ya se ha dejado claro que no contemplan una nueva cesión. La única opción viable para que Gelabert continúe en El Molinón pasa por ejecutar una cláusula de compra cercana a los dos millones de euros. Y ese es justamente el gran problema. Una cifra que hoy por hoy está fuera del alcance del Sporting, un club que sigue luchando por mantenerse en la Segunda División del fútbol español y que no atraviesa su mejor momento económico.
Garitano potencia al jugador y pone al Sporting en un dilema
La llegada de Asier Garitano ha cambiado por completo el panorama del equipo, y también ha sido clave en la evolución de Gelabert. El entrenador vasco le ha dado al mediapunta mayor libertad ofensiva, y ese pequeño ajuste ha generado un gran impacto. El futbolista ha respondido con goles, asistencias y liderazgo. En apenas dos partidos, Gelabert firmó tres goles, incluyendo un doblete ante el Mirandés que lo consolidó como el jugador más desequilibrante del Sporting en este tramo del campeonato. Su rendimiento ha sido tan deslumbrante que se ha convertido en un activo demasiado valioso, incluso para el propio club que lo disfruta.
“Tiene talento y entendí que podía ayudarle a sacar su mejor versión”, explicó Garitano, dejando en claro que siempre creyó en el potencial del jugador. Pero esa misma apuesta que potenció al mediapunta, hoy se convierte en un dilema para la entidad. La imposibilidad de repetir la fórmula de cesión —debido a la negativa del Toulouse— pone al club gijonés en una encrucijada. Deben tomar decisiones importantes con un margen económico mínimo y bajo la presión de un mercado cada vez más competitivo.
La Liga MX emerge como amenaza para el proyecto rojiblanc
Mientras en Gijón tratan de encontrar fórmulas creativas para retener a su nueva joya, desde el otro lado del Atlántico comienzan a aparecer nuevas amenazas. La Liga MX, con clubes económicamente más poderosos, ha empezado a mostrar un interés creciente por Gelabert. Varios equipos mexicanos ya han preguntado por las condiciones de su traspaso, sabiendo que podrían satisfacer las exigencias del Toulouse sin mayores problemas. Si alguna de estas entidades decide avanzar con una oferta formal, el Sporting quedaría prácticamente fuera de la puja. Una desventaja estructural frente a mercados con mayores recursos y menos restricciones presupuestarias.
A pesar del ruido externo, Gelabert ha sido claro en sus intenciones. “Mi deseo es seguir en Gijón”, ha dicho en más de una ocasión. El factor emocional juega a favor del Sporting, que buscará convencerlo de continuar apelando a lo sentimental. Sin embargo, en el actual contexto del mercado, la voluntad del futbolista podría no ser suficiente. La solución pasa por liberar masa salarial o generar ingresos importantes que permitan afrontar una operación costosa. Mientras tanto, el club vive entre la ilusión de un nuevo ídolo y la incertidumbre de no poder retenerlo. Gijón sueña con Gelabert… pero el fútbol, como tantas veces, se juega también fuera del campo.