Nacho Redondo es una de las figuras más interesantes de la nueva ola de humor latinoamericano. Parte de la inmensa diáspora venezolana, el comediante puede haber saltado a la fama internacional gracias a su particular sentido del humor y a los años de trabajo junto a Chris Andrade y Leo Rojas en el podcast ‘Escuela de Nada’.
Ahora pone su giro particular a la idea del ‘crowdwork’ con ‘Traumas’, su nueva presentación. Un show que gira alrededor de sus traumas personales y los de su audiencia en un monólogo que considera terapéutico. Sobre la presentación y sobre su trayectoria, habló desde México con el Diario Qué!.
Pregunta: Empezaste tu carrera con un humor muy ácido, pero da la sensación de que se ha hecho un poco más amable.
Respuesta: Desde mi perspectiva y desde mi experiencia, yo siempre quise ser un comediante como muy busca pleito, ¿en qué sentido? Tipo, yo quería cruzar la línea y retarte, creo que eso respondía mucho al estado emocional en el que yo estaba en mi vida en ese momento. Tiene mucho que ver con, muchas gracias, con capaz la situación país, muchas cosas por las que uno atravesó en ese momento que te mantenía como en un estado constante de rabia, creo que tenía mucho que ver con eso.
A medida que fue pasando el tiempo, fíjate que no considero que mi tipo de humor ha cambiado, pero sí la manera en la que lo expreso. Es muy diferente y de hecho lo viví con mi propio especial de discapacitado. Discapacitado comenzó de una manera y a pesar de que es exactamente la misma rutina y el mismo chiste, se percibe de otra.
Es porque yo tengo otra manera de hacerlo. Todos los especiales que yo tengo tienen chistes que no necesariamente son del agrado de la gente que no le gusta el humor, como afilado en ese sentido. A mí no me gusta el término humor negro, me parece muy pretencioso, pero es la manera, es simplemente el espíritu con la que hago este chiste ahora.
El delivery cambió por completo porque yo me di cuenta que estaba sin querer buscando que la gente la pasara mal, retándoles con mi humor oscuro, como lo quieras ver, cuando en verdad hay una manera de hacer el mismo chiste, pero de una manera donde tú no puedes evitar reírte. Y eso tiene mucho que ver con la manera en la que yo lo hago. Creo que básicamente maduré, no tiene mucha más cancha que eso.
Pregunta: Muchos, yo creo que una de las cosas por las que más gente te conoce probablemente sea por Escuela de Nada.
Respuesta: Sí señor.
Pregunta: Tu última gira que hiciste con trabajo fue con ellos y ahora vuelves a presentarte tú solo. Quería saber un poco cómo es la experiencia de estar quizás acompañada de una tarima, que un poco puedes apoyarte en Chris o en Leo, o estar solo, que depende de ti, que si no se ríe nadie es tu culpa.
Respuesta: Es como si tocara dos géneros de música diferentes teniendo una banda. Es muy loco porque son dos ejercicios completamente diferentes, sin además quitar de la ecuación que todos los sitios que yo visito solo, luego los visito con los muchachos. Entonces al año yo giro, estoy haciendo 100-120 shows al año, la mitad de un tipo, la mitad del otro.
Mi show solo evidentemente tiene un matiz y una habilidad completamente diferente a la de si estoy apoyado, por ejemplo de Cris y Leo en un show de ‘Escuela de Nada’. Sin tomar en cuenta además que, tomando en cuenta más bien además que el ejercicio por ejemplo de un show de Escuela de Nada es casi que improvisado. No tiene un hilo conductor generalmente, a menos que casi siempre definimos un tema o algo por el estilo, pero te lo juro que creo que a veces se me hace hasta más fácil solo, aunque parezca mentira, porque tengo un poco más de control de la situación, porque hay un leitmotiv que está animando a que el show avance, mientras que el otro es un poco más crudo y es un poco más punk.
Entonces yo estoy acostumbrado a… porque a pesar de que evidentemente como tú bien dices, Escuela de Nada sigue siendo como que este outlet donde yo tengo más presencia en internet. Cuando yo empecé a hacer Escuela de Nada ya yo tenía siete años haciendo stand-up.
Entonces no hay forma de que Escuela de Nada le llegue a la cantidad de presentaciones que yo he tenido solo en mi vida. Entonces por eso se me hace un poquito más cómodo, pero contar con Cris y con Leo en la tarima siempre va a ser de ayuda, porque además yo disfruto mucho lo que ellos hacen. Entonces me da mucha risa y yo lo disfruto como audiencia.
Entonces sí es un poquito de, coño, qué bueno que no estoy solo aquí y puedo dejar que el show ande, pero al mismo tiempo es un performance y hay que montarse, pero yo disfruto mucho lo que hacen esto. Entonces sí hay una diferencia muy grande entre cómo me siento en el escenario acompañado. Definitivamente siento más ayuda y disfruto un poquito el show y solo, coño, tiene mucho más de lo que a mí más me gusta hacer del mundo y sí merece una atención ser un poquito egoísta ahí.
Pregunta: Cuando te presentas en una tarima, bueno, vienes a Madrid, Perú, etcétera, que evidentemente como todos los comediantes, músicos o artistas venezolanos, hay un porcentaje alto del público venezolano, pero tú además has crecido mucho fuera y empiezas a atraer gente que no es venezolano, que a lo mejor no sabe nuestro drama de memoria. ¿Cómo manejas ese equilibrio para presentarle al público algo, para que se ría todo el mundo?
Respuesta: Bueno, yo tengo una ventaja obvia que es que yo vivo con una persona extranjera, entonces adaptarme a la dinámica de mi propia casa, que fue básicamente el noviazgo, luego vivir juntos, luego casarse, a eso súmale amistades, familia política, o sea como que un montón de mi entorno me obligó sí o sí adaptarme a conversar para la gente que no necesariamente conoce nuestro argot, sabes, entonces se me ha hecho más fácil llevar a traducir eso a tarimas, sobre todo porque además la meta de enamorar al mexicano, por ejemplo, o enamorar a un chileno o a un español y que vengan a mi show, y que lo entienda.
Que sepa que no tienes que saber ciertos códigos o cierta información que te aísle, o que bueno, esto es un show solo para venezolanos, esa meta me ayudó mucho también a entrenarme así, las primeras veces que yo me presenté en México fueron un absoluto desastre porque nadie me entendía, nadie, nadie, ni con mis mejores chistes, y yo tenía un buen rato siendo estando, y primero fue un increíble ejercicio de ego, como que mira compadre, tú das risa, pero en tu casa, tú no das risa aquí.
Ajustarme a eso, buscar la manera, la manera de decir las palabras, hablar más lento, por ejemplo, que es una cosa que nosotros los venezolanos no, nunca dimensionamos lo rápido que hablamos, es absurdo, la gente de verdad se queda viéndonos pensando:, ‘¿Qué acabas de decir en los últimos cinco minutos que te tengo escuchando decir onomatopeyas?’ Porque eso es lo único que escuché, bueno, yo creo que el ejercicio es difícil, toma mucho tiempo, pero cuando empiezas a verle el queso a la tostada, en ese sentido, empiezas a sentirte como que mierda, qué cool, que puedo, que puedo lograr esto.
Yo estoy comenzando a sentirlo en México, que los shows se están llenando, que obviamente acá en México no existe la migración tan masiva de venezolanos, entonces puedo decir con todo el orgullo del mundo que no necesariamente a mis shows viene puro venezolano, bien como lo estudiaste y lo definiste, lo tienes superclaro, y que me tomó años que la gente me escuchara y me prestara atención, para que además se sintieran parte del show, es un trabajón.
Pregunta: Hay algo que creo que, bueno, esto tiene más que ver con cosas que estoy viendo mucho en el tema de comedia, pero que se está poniendo muy de moda, el tema del crowdwork ¿tú también lo manejas, lo tienes planteado en esta gira, o no es lo tuyo?
Respuesta: Traumas es un show de crowdwork mío, lo que pasa es que, lo que a mí me, yo identifique igual que tú, que evidentemente estaba pasando en internet, y esto responde a algo muy sencillo, que es que de verdad nosotros, los comediantes, para poder crecer en redes y tener una audiencia cada vez más grande, para que vengan a los shows y se tripen en el pedo, no podemos esperar a grabar un especial cada dos años, cada tres años, o como lo quieras ver, y tener nuestro material bonito, para que la gente lo disfrute en internet, y así crecer en redes. Toda esta moda de crowdwork crece, nace porque hay una manera rápida y efectiva de tener clips desechables, y poder crecer en redes. El tema es que en mi caso, en particular, yo quise adherirle un concepto, y como mi entorno es psicólogo y todo ese pedo, me entrené para escuchar los problemas de la gente, y traumas justamente invita a eso.
Yo propongo mis traumas porque no es nada más con la gente, también la mitad del show soy yo, y tiene todo un hilo conductor, y donde invito a la gente a compartir un trauma personal con la sala, y hacemos como una especie de catarsis, terapia grupal ahí, donde ocurren cosas increíbles, como de repente que alguien llore, y la gente se para y los abrace, por ejemplo. O sea, no tienes idea de las cosas tan bonitas que he visto, a pesar de las cosas horrorosas que escucho, que es fijo. Entonces, ese es mi aporte al mundo del crowdwork, que además muere ahorita en España, que voy a grabarlo en Madrid.
Bueno, tengo show allá en Tenerife y en Barcelona, o sea, como que en España, que siempre me trata muy bonito, tengo los shows clásicos, que es Valencia, Barcelona, Tenerife y Madrid, y grabo en Madrid el especial para estrenarlo en el verano, y no tocar ese crowdwork. Ya creo que fue suficiente crowdwork para mí, antes del show nuevo. Evidentemente, seguro se me atravesarán las ganas de inventar algo en el camino, pero es algo que disfruto mucho, honestamente, pero siento que si no tiene concepto, me aburre. Estoy harto del tipico ‘¿Con quién viniste?’ Métele algo divertido.
Respuesta: Todo hablabas ahorita de haber escuchado cosas bonitas y cosas muy feas en esto. ¿Qué es lo más bonito y qué es lo más feo que te has tocado en este proceso?
Pregunta: Mira, creo que el más feo que he publicado hasta la fecha y que he vivido, que no se me sale de la cabeza, y evidentemente se hizo muy viral por eso, fue la historia de una chama acá en México, en Ciudad de México, que cuando ella era niña, le hicieron cargar a su hermanita bebé, y se le cayó y falleció. Eso es lo más horrible que me han contado, y creo que está jodido de superar. Y he escuchado cosas que se le acercan.
Ahora, lo más bonito que ha pasado en un show es, obviamente, el mero concepto de esto es muy bonito porque es una cantidad de gente que se agrupa y no tienes idea la necesidad que tiene la gente de soltar estas cosas de su vida. Y la manera en la que lo hacen en el show es básicamente terapéutico. Es, vengo a soltar esta porquería que me pasó y estamos todos alineados y agarrados de la mano en, uno, nos podemos reír de esto juntos, que es divertido y que es una manera muy bonita de hace terapia.
No es para todo el mundo. Eso lo tengo ultra claro. Hay gente que no le gusta eso. Eso no está ni bien ni mal. Y al mismo tiempo, este, hacemos un reconocimiento de que nos conecta las tragedias y sobre todo como latinoamericanos. O sea, nosotros somos personas que, como todo el mundo, vive tragedias, vive eventos horrorosos y que la verdad es que Traumas es un show que celebra, que estamos aquí a pesar de esas vainas.
Y eso a mí, para mí, tiene un valor inolvidable. Y eso es muy bonito y lo ves en los shows. Por ejemplo, en Nueva York me pasó que una chama contó como un, porque obviamente la gente cree que todo es como que extremo, como lo de la niña o de repente un caso de abuso, por ejemplo, que pasa mucho y es más común de lo que uno cree.
Pero también hay cosas como que, coño, a mí me dolió mucho que un, por ejemplo, que un chamo me dejara. Eso pasó mucho y me bosteó y lo quería mucho. No sé qué. Y esta persona fue solo al show, solo a soltar eso. Y me recuerdo que lloró y estaba llorando por una persona de Ecuador. No se me olvida.
Y lloró y la gente del show se paró a sentarse con ella y abrazarla, por ejemplo. Eso es mágico. Es una vaina inimaginable. Eso pasó en Nueva York y no se me olvida tampoco. Y esa, esa sensación de camaradería a través de la tragedia, verga, yo estoy muy orgulloso de ese concepto, honestamente.
Pregunta: Vale, yo un poquito terminando. Bueno, hablas de que vas a acabar la presentación de Madrid. ¿Hay algo diferente a la presentación de Madrid aparte de la grabación?
Respuesta: Bueno, a mí, yo a Madrid le debo un… Tengo que decir lo que tiene especial para mí. Madrid me traumó a mí, porque yo viví en Madrid y la pasé muy mal.
Hace como 15 años. Y yo le debo un especial a Madrid justamente porque es el símbolo de enfrentar un trauma. Significa superar un trauma cara a cara, verlo a la cara, no evadirlo. Y la otra es que el año pasado, el show que yo hice de Huevo Dragón en Madrid fue el mejor de toda la gira. Y la gente, o sea, es completamente culpa de la gente.
La gente es responsable de haberme dado ese nivel de show. Y yo dije no hay manera de que yo no le dé un show a Madrid. Y yo estoy seguro que la gente se está preparando porque además está a punto de agotarse a tres meses de la función. Y yo sé que la gente sabe a lo que va. Entonces yo creo que Madrid me va a sorprender con los traumas más increíbles del mundo.
Y que definitivamente estoy haciendo… Yo no me tomo a la ligera mis especiales. Mis especiales tienen toda una carga artística y toda una manera de dirigirlos y una manera de hacerlos donde yo le voy a dar respeto a esa audiencia. No es que ninguna audiencia sea peor o mejor que otra, pero Madrid siempre ha sido muy cool conmigo y van a tener un show increíble. Eso es definitivo.
Pregunta:a. A mí me gusta mucho preguntarle, despedirme a los artistas, músicos, comediantes, algo que no les hayan preguntado en este proceso de promoción que quieran contar, algo que quieran narrar, algo que quieran agregar a todo el tema.
Respuesta: Mierda, qué buena pregunta. No pregunta. Mira, yo creo que lo más…
Lo que más les pueden preguntar, por ejemplo, sobre la gira que estoy haciendo ahorita y sobre el encanto que tiene para mí y sobre todo para la gente que está leyendo esto o viendo esto, es que no solamente se trata sobre los traumas de la gente. Eso quiero dejarlo muy claro, porque la gente creería que yo voy y yo empiezo. Bueno, cuéntenme.
Entonces el show recae como que en la gente y no en mí. Más de la mitad del show se trata de mis traumas y parte de este show para mí es muy terapéutico porque aparte de que estoy soltando una parte muy personal de mi vida, quiero dejar claro que no están solos en esta dinámica. Entonces para mí es importante que sepan que para habilitar sus traumas, yo suelto los míos. Entonces es un toma y dame. No es crowdwork por hacerlo.
Quiero que sepan que yo comparto los míos y son bien feos y bien profundos y me encanta que lo sepan, porque quiero que entiendan cómo fue mi vida y cómo puede ser tu vida a pesar de las cosas horribles. Entonces yo estoy muy orgulloso y muy feliz en este momento de mi vida, pero no niego ni he llevado lo feo que me pasó y me gusta integrarlo a quien soy ahorita. A mí me encanta quién soy ahorita y eso tiene que ver mucho con eso.
No quiero desaparecerlo a pesar de que fue espantoso. Entonces quiero que sepan que van a escuchar mis traumas y que es parte del show. No quiero que crean que solamente son los de ellos.
Los míos ocupan más de la mitad del show. Entonces es un show bastante divertido por eso, porque vamos a escuchar pura tragedia, atrás de todo el mundo.