Especial 20 Aniversario

La IA también invade Netflix afectando a la experiencia de usuario

La IA ya está en Netflix y en casi todas partes, ya forma de nuestras vidas. Pero esta vez se trata de uno de los rincones de entretenimiento digital más utilizado a nivel mundial, se trata de Netflix. Así es, la IA nos vuelve a sorprender con sus poderosas habilidades, esta vez no solo se limita a las acostumbradas recomendaciones personalizadas o las mejoras técnicas, sino que va mucho más allá, estamos hablando de generación de contenidos, selección de imágenes promocionales e incluso, edición de subtítulos automática.

Y es que la IA ya empieza a intervenir en temas mucho más complejos asociados a la experiencia del usuario. Esta tecnología avanza lento, pero con paso firme y de manera silenciosa, lo que nos deja muchas interrogantes a su paso, sobre hasta qué punto los algoritmos moldean nuestra forma de consumir historias, y si esa intervención, aparentemente neutra, podría estar modificando nuestras decisiones sin que seamos plenamente conscientes.

Y tal como era de esperarse, Netflix ha caído rendida a los pies de la IA. Para nadie es un secreto que esta plataforma de streaming es conocida por su capacidad de adaptación al gusto del usuario, por lo que ha decidido utilizar la IA para optimizar lo que vemos y como lo vemos, tomando como referencia patrones de comportamiento del usuario. Aunque esta innovación promete eficiencia y personalización, también despierta dudas sobre la pérdida de espontaneidad.

Ahora, el espectador ya no es solo quien elige qué ver, sino también quien es guiado, casi sin notarlo, y esta tal vez es la parte más peligrosa de la historia,  por una inteligencia artificial que decide qué ofrecerle y cómo presentárselo. Bueno o malo, habrá que probarlo.

Recomendaciones que ya no sorprenden: cuando el algoritmo se vuelve predecible en Netflix

Recomendaciones Que Ya No Sorprenden: Cuando El Algoritmo Se Vuelve Predecible
Fuente: Agencias

Pero Netflix ya venía utilizando la IA para las recomendaciones, de hecho ha sido durante años uno de sus mayores activos. Sin embargo, en los últimos tiempos, muchos usuarios han comenzado a notar una repetición constante de títulos, temáticas y formatos en sus perfiles.

No se trata de una novedad para Netflix, al punto de que ya los usuarios empiezan a realizar observaciones sobre el comportamiento de la IA dentro de la plataforma. La IA, de acuerdo a los comentarios de los usuarios, debería afinar los gustos y ampliar las posibilidades de elección, parece estar encerrando a los espectadores en burbujas de contenido donde lo diferente o inesperado apenas tiene cabida. Esta previsibilidad reduce el descubrimiento y limita el atractivo de explorar el catálogo completo.

Por otro, comentan los expertos, la plataforma se viene centrando en patrones de consumo previos, por lo que corre el riesgo de reforzar hábitos en lugar de estimular la curiosidad, lo cual, lejos de ayudar, lo que hace es perjudicar a la plataforma. Los algoritmos priorizan lo “más visto” o “más similar”, lo que puede empobrecer la experiencia cultural del espectador.

Todo esto hace que, en lugar de sorprender con nuevas propuestas, Netflix repite fórmulas que garantizan tiempo de visualización, pero no necesariamente calidad o variedad. Así, la IA, lejos de mejorar la experiencia del usuario, podría estar diluyendo uno de los mayores valores del cine y las series: “su capacidad de sorprender y emocionar”.

Imágenes y descripciones generadas por IA: ¿una ayuda o una trampa visual?

Imágenes Y Descripciones Generadas Por Ia: ¿Una Ayuda O Una Trampa Visual?
Fuente: Agencias

La generación de imágenes que utiliza Netflix con IA como una forma de crear una  sinopsis personalizada para cada usuario, ya ha empezado a generar polémica. Esta herramienta de la plataforma, que inicialmente se presentaba como una innovación a la hora de navegar, ya ha empezado a levantar dudas entre los usuarios y expertos en el tema.

Algunos suscriptores ya han detectado que las miniaturas cambian constantemente y, en ocasiones, “no representan fielmente” el contenido real de la serie o película. Esto puede generar una expectativa equivocada, llevando al espectador a elegir títulos que, en realidad, no coinciden con sus intereses o estado de ánimo, una forma inteligente de “engañar” al usuario.

El uso de IA para crear estos elementos promocionales también plantea interrogantes éticos y no en el sector audiovisual o de entretenimiento, sino en casi todas las áreas donde ya se utiliza. Las imágenes generadas pueden manipular visualmente al usuario, resaltando ciertos aspectos del elenco o la trama que ni siquiera son centrales en la narrativa.

Esta es una práctica bastante utilizada en los medios audiovisuales, con el único objetivo de lograr maximizar el clic, sacrifica la honestidad del contenido, siendo esta una práctica que expone a la plataforma un gran riesgo, porque el usuario se siente defraudado y podría buscar otras opciones más confiables.

En vez de funcionar como guía fiable, la IA actúa como un agente de marketing que distorsiona la experiencia previa al visionado, afectando la percepción general del producto audiovisual. Y es que al final, la IA actúa como se le pide que lo haga, si actúa como una agente de marketing es porque está respondiendo a una necesidad del cliente, en este caso, Netflix.

El riesgo de la homogeneización: cómo la IA podría limitar la diversidad de contenidos

El Riesgo De La Homogeneización: Cómo La Ia Podría Limitar La Diversidad De Contenidos
Fuente: Agencias

Muchos expertos han levantado la voz, porque el uso de la IA dentro de Netflix, es decir, aplicada al concepto audiovisual, no solo estaría afectando la forma en la que los usuarios consumen el producto, sino que también estaría influyendo en la forma en la se produce ese producto. Con algoritmos capaces de identificar qué tipo de narrativa, actores o estilos generan más visualizaciones, las plataformas como Netflix tienden a replicar fórmulas exitosas una y otra vez.

Esto ha provocado “un aumento de series con estructuras y temáticas similares”, lo que resta espacio a propuestas originales, arriesgadas o de menor perfil comercial. Esta lógica algorítmica podría ahogar la diversidad cultural y creativa que plataformas como Netflix prometían fomentar en sus inicios. Al privilegiar los datos sobre las decisiones editoriales, se reduce la posibilidad de que voces nuevas y distintas lleguen al público global.

Entonces, la IA dentro de Netflix se ha convertido en un “sofisticado” filtro que tiene la posibilidad de decidir por ti, es decir, lo que tú te mereces ver, basándose solo en un patrón de comportamiento, y dejando a un lado criterios tan importantes como los sociales, los culturales e incluso los históricos, simplemente porque no encajan con las métricas del éxito. En consecuencia, el espectador recibe una oferta más uniforme, menos rica y, en muchos casos, desconectada de la complejidad del mundo real.