En la Real Sociedad ya se está trabajando en la proyección de los jóvenes talentos de Zubieta de cara a la próxima temporada. Uno de los nombres que más ilusiona en la cantera txuri-urdin es el de Mikel Goti, un mediocentro con gran recorrido y visión de juego que ha llamado la atención de Imanol Alguacil. El técnico donostiarra es consciente de su potencial, pero también de que necesita acumular experiencia en el fútbol profesional para dar el salto definitivo al primer equipo.
Por ello, el club valora seriamente la opción de que Mikel Guti se marche cedido y todo apunta a que el Mirandés podría ser su destino. En Anduva han demostrado ser una excelente plataforma de desarrollo para los jugadores jóvenes, y la Real Sociedad ya ha utilizado esta vía con éxito en el pasado. Con Imanol supervisando su progresión desde la distancia, Mikel Goti tendría minutos, responsabilidad y la posibilidad de curtirse en un entorno competitivo como el de Segunda División.
El modelo Gorrotxategi, el espejo perfecto
La operación que se está gestando con Mikel Goti no es nueva en la hoja de ruta de la Real Sociedad. El ejemplo más reciente es el de Jon Gorrotxategi, otro canterano que se marchó al Mirandés para ganar rodaje y ahora podría luchar por ganarse un hueco en el primer equipo. Esta fórmula ha sido respaldada por el propio Imanol, quien valora mucho las cesiones bien planificadas y personalizadas para cada jugador.
El caso de Gorrotxategi demostró que una temporada en Miranda de Ebro puede suponer un antes y un después para los jóvenes valores de Zubieta. En el club ven en Mikel Goti un perfil similar en cuanto a madurez, proyección y capacidad de adaptación, por lo que repetir esa fórmula podría ser beneficioso tanto para el jugador como para el club. Además, la buena relación entre la Real y el Mirandés facilita este tipo de movimientos.
Imanol, clave en la evolución de Mikel Goti
La confianza que Imanol tiene depositada en Mikel Goti será fundamental para el futuro del futbolista. El entrenador vasco ha demostrado tener un excelente ojo para detectar talento joven y gestionarlo con inteligencia, como ya hizo con Zubimendi, Barrenetxea o Turrientes. Aunque no podrá contar con Goti de forma inmediata, ve con buenos ojos que el mediocentro sume experiencia en un entorno exigente.
Desde el cuerpo técnico se seguirá muy de cerca la evolución del jugador en caso de que se concrete la cesión. El objetivo no es otro que tener a Mikel Goti de vuelta en 2026 preparado para competir por un puesto en el primer equipo. Para Imanol, es una apuesta a medio plazo que puede dar grandes frutos en el futuro inmediato de la Real Sociedad.