Al delantero italiano Balotelli se le ocurrió una curiosa apuesta con el camarero. Si el trabajador se tiraba al agua en una Vespa y sin ropa, el irreverente jugador de fútbol, que se encuentra de vacaciones en Nápoles, le daría 2.000 euros.
El camarero napolitano, tras quitarse la ropa, se montó en su Vespa y se lanzó al mar. Después reconoció que la Vespa «solo valía 600 euros».
El vídeo, publicado por el propio Balotellli, provocó numerosos comentarios y reacciones. Entre ellas hubo muchas críticas por la contaminación que la motocicleta puede provocar en el mar, aunque el futbolista respondió en Instagram mostrando la Vespa rescatada.