Si eres autónomo o te encuentras vinculado a este pequeño pero poderoso mundo, seguro ya has escuchado hablar de la gran jubilación que se espera para el 2028. Sí, hablamos de esos 600.000 autónomos que, en los próximos tres años, empezarían a colgar el cartel de «cerrado por jubilación». Y aunque parece un tema bastante “normal” va a producir un impacto importante en la economía española o como mínimo, un verdadero desafío: ¿quién va a ocupar esos huecos en sectores como la construcción, el transporte y la agricultura, donde los jóvenes no quieren saber nada? La tarifa plana invertida podría ser la solución para el relevo generacional.
La tarifa plana invertida que propone la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos de España (UPTA) tiene como objetivo que los autónomos en sus últimos años de cotización se conviertan en mentores de jóvenes con formación en FP dual. Y el objetivo de poner en marcha una tarifa plana invertida es que funcione a la inversa de la tarifa plana tradicional. Es decir, en lugar de recibir ayuda económica al inicio de su actividad, los autónomos que estén cerca de jubilarse podrían contar con un incentivo para acoger a estos nuevos emprendedores en sus negocios.
Así, los jóvenes no solo se empapan del conocimiento, sino que se garantizan un futuro económico y laboral, mientras los veteranos transmiten su experiencia y el punto más importante, sus clientes. Sería como una traspaso de conocimientos y clientes, en el que todos salen ganando, el autónomo podrá retirarse a su jubilación, el joven emprendedor no empezará de cero, los clientes seguirán contando el negocio que le resuelve los problemas y lo más importante, la economía no se verá tan afectada con el cierre de estos negocios.
Lo mejor de todo es que esta tarifa plana invertida no solo ayudaría a solucionar el gran problema del relevo generacional, que ahora mismo no representan un gran problema, pero que a mediano y largo plazo empezará a afectar la economía del país, sino que, si se aplicara adecuadamente, podría aliviar el peso de la jubilación activa.
Según los representantes de la UPTA, esta medida ayudaría a garantizar la sostenibilidad del tejido empresarial y la vida laboral de los autónomos, con jóvenes llenos de energía y capacidades digitales para darle ese empujón de modernización que muchos negocios necesitan. Es un ganar-ganar para todos.
Un cambio de paradigma: ¿qué es la tarifa plana invertida y cómo funciona?
Seguramente ya habías escuchado hablar de esta propuesta, porque es una propuesta que viene sonando desde hace varios meses. La tarifa plana invertida, ofrecida por UPTA, es la respuesta para aquellos autónomos que están en sus últimos años de cotización y buscan hacer un relevo generacional. En lugar de pagar menos al principio, lo hacen cuando están cerca de jubilarse, lo que les ayudaría con el tema de las cotizaciones y aportando una mayor estabilidad a su jubilación.
Esta propuesta lo que persigue es incentivar lo que muchos llaman el relevo generacional de una forma en la que todos los involucrados sean beneficiados. Los autónomos podrán transmitir su experiencia a una generación que se inicia en un mercado, bastante más competitivo. Una de los aspectos positivos de la propuesta es que estos años de experiencia acumulados por estos profesionales no se pierdan, sino que sea aprovechada por estos jóvenes de la FP.
Con la tarifa plana invertida, los autónomos que se jubilan podrán recibir apoyo en sus últimos años de actividad, a la vez que los jóvenes que se incorporan podrán aprender y revitalizar esos negocios tradicionales.
El relevo generacional en riesgo: sectores clave que necesitan un empuje urgente
Para nadie es un secreto que muchos sectores de la economía española se encuentran en peligro de extinción si no se toman medidas rápidas y efectivas. Con una población de autónomos envejecida, y esto es un secreto a voces, algunos sectores, como el transporte, la construcción y la agricultura, están viendo cómo el relevo generacional se complica cada vez más.
Si bien no falta gente joven con ganas de emprender, hay áreas que simplemente no les atraen, otro secreto a voces, las nuevas generaciones no han mostrado interés por las actividades tradicionales. Por ejemplo, un tercio de los transportistas en España tiene más de 55 años y la mitad supera los 50, mientras que en construcción y agricultura, el panorama no es mucho mejor. Si no conseguimos atraer a nuevos autónomos, corremos el riesgo de que ciertos oficios desaparezcan.
La tarifa plana invertida se presenta como una de las soluciones más prometedoras para este problema y es una propuesta además en la que todos salen ganando. Además de las ayudas económicas para los autónomos en sus últimos años, esta medida les permitiría tener un «relevo» en la forma de jóvenes de la FP dual, formados con las habilidades necesarias para revitalizar estos sectores.
UPTA señala que si no conseguimos que los jóvenes se metan en estas actividades, podríamos enfrentar una auténtica crisis económica en el campo y en muchas pequeñas empresas urbanas, sólo por poner un ejemplo sencillo. Así que, lo que está claro es que hay que tomar acción ahora si no queremos quedarnos sin autónomos en el futuro cercano.
Jubilación activa y FP dual: la fórmula para un futuro con más autónomos jóvenes
El concepto de jubilación activa juega un papel fundamental en la propuesta de la UPTA, es un concepto que cada vez es más popular, pero que aún no está totalmente desarrollado como se debería, además de que es poco conocido para algunos sectores. Actualmente, los autónomos pueden seguir trabajando mientras perciben una parte de su pensión, pero el porcentaje ha bajado y las condiciones no están muy claras. De acuerdo a los representantes de la UPTA, el actual sistema no está aprovechando todo su potencial, y es aquí donde entra en juego la FP dual.
El plan de UPTA consiste en crear un puente entre los autónomos que están por retirarse y los jóvenes que quieren emprender, con la FP dual como herramienta clave. Si conseguimos que los jóvenes se integren en los negocios de los autónomos, no solo aseguramos el futuro de esos sectores, sino que también se aporta a la economía un flujo de nuevos emprendedores, con capacidad para adaptar los negocios a la digitalización y a los nuevos tiempos. Sería una combinación perfecta, porque los jóvenes obtienen experiencia de primera mano, una base para empezar el negocio y además con la posibilidad de modernizarlo.
El resultado sería un escenario económico bastante equilibrado, con jubilaciones activas bien gestionadas, profesionales con jubilaciones dignas, y un relevo generacional que garantice la continuidad de los negocios más tradicionales y que no estaría empezando de cero.