El centrocampista inglés ha conocido su sanción este miércoles, tras el famoso «fuck off» a Munuera Montero
Jude Bellingham ha conocido este miércoles la sanción del comité tras su expulsión del pasado fin de semana en El Sadar ante Osasuna. El inglés estará dos partidos sin poder ayudar a su equipo tras dirigirse al colegiado, Munuera Montero, con el término «fuck off» que tanta guerra ha generado estos últimos días entre los periodistas deportivos de España.
La sanción a Bellingham va a levantar ampollas con total seguridad. En el Real Madrid porque consideran que no fue un insulto directo al árbitro del partido. De hecho, en el seno del club blanco todavía aspiran a interponer un recurso. Pero tampoco va a dejar satisfechos a sus rivales, ya que, a efectos de reglamento, da la sensación de que hay un trato de favor importante.
La sanción de Bellingham no se ajusta al reglamento
El reglamento de la Real Federación Española de Fútbol dice que «insultar, ofender o dirigirse en términos o actitudes ofensivas al árbitro principal, asistentes, cuarto árbitro, directivos o autoridades deportivas, salvo que constituya una falta más grave, será sancionado con suspensión de cuatro a doce partidos».
Reglamento en mano, lo que hizo Bellingham el pasado sábado es claramente eso. Sin embargo, en la sanción, se especifica que Jude tendrá dos partidos de suspensión al considerar menosprecio o desconsideración, pero no un insulto u ofensa. Un hecho que cabrea, y mucho, al resto de clubes, ya de por sí mosqueados con los comunicados y quejas del Real Madrid.
El Real Madrid recurrirá la sanción de Bellingham
Una vez conocida la sanción, desde el Real Madrid todavía van a ir más allá y presentarán un recurso a apelación. Quieren demostrar que no se trata de un menosprecio y que ni mucho menos iba dirigido directamente a Munuera Montero, sino que era un simple grito de protesta hacia sí mismo. Es de esperar que no se retire la sanción y que, al menos, sí que cumpla esos dos encuentros.
Dichos encuentros serán ante el Girona en el Santiago Bernabéu y ante el Betis en el Benito Villamarín. No son encuentros sencillos, menos todavía teniendo en cuenta que venimos de una eliminatoria de muchísima intensidad ante el Manchester City y que el FC Barcelona y el Atlético de Madrid descansan antes de afrontar sus choques ligueros.