El Real Zaragoza mató el instinto goleador del senegalés
El fichaje de Pape Gueye por el Real Zaragoza en la temporada 2022-23 generó muchas expectativas entre la afición maña. El delantero senegalés venía de destacar en el Oostende belga, donde anotó 25 goles en 71 encuentros, lo que lo convertía en una apuesta ilusionante para el ataque zaragocista. Sin embargo, su rendimiento estuvo muy lejos de lo esperado y dejó una huella decepcionante en La Romareda.
Durante su etapa en el Zaragoza, Gueye disputó una temporada completa sin ser capaz de marcar un solo gol, algo inaudito para un delantero con sus antecedentes. Su falta de acierto de cara a portería, unida a la poca influencia que tuvo en el juego ofensivo del equipo, hicieron que terminara perdiendo protagonismo en el esquema del entrenador. Su salida en el verano de 2023 fue vista como un alivio tanto para el club como para el propio jugador, quien necesitaba un cambio de aires para recuperar su mejor versión.
El renacer de Pape Gueye en Bélgica
Tras su salida del Real Zaragoza, Pape Gueye recaló en el Molenbeek belga, donde volvió a reencontrarse con el gol. En el equipo de la Primera División de Bélgica, el delantero mostró una versión muy diferente a la que se vio en España, logrando 11 tantos en 32 partidos y convirtiéndose en una de las referencias ofensivas del conjunto belga.
Su paso por el Molenbeek fue clave para recuperar confianza y demostrar que su olfato goleador seguía intacto. Su rendimiento en Bélgica llamó la atención de otros clubes europeos, lo que le permitió dar un nuevo salto en su carrera en el último mercado de fichajes.
Clave en el Blackburn Rovers
En el mercado de verano de 2024, Pape Gueye fichó por el Blackburn Rovers de la Championship inglesa, donde ha mantenido su gran nivel. En 31 partidos disputados hasta la fecha, el delantero ha marcado cinco goles y ha repartido seis asistencias, consolidándose como una pieza fundamental en el ataque del equipo inglés.
Su buen desempeño en Inglaterra contrasta con el pobre rendimiento que ofreció en Zaragoza, lo que ha llevado a muchos aficionados a preguntarse qué falló en su etapa en La Romareda. Quizás el estilo de juego del equipo o la falta de confianza influyeron en su rendimiento, pero lo cierto es que su paso por el Real Zaragoza fue un paréntesis negativo en una carrera que, tras su salida, ha vuelto a despegar.