Kvaratskhelia se muda a París para estar a las órdenes de Luis Enrique, pero se fija en un crack del Deportivo
El georgiano Khvicha Kvaratskhelia, aún jugador del Nápoles, apunta a ser una de las grandes bombas del mercado de invierno, pero que también podría afectar al Deportivo de la Coruña. El jugador pondrá rumbo al PSG por una cantidad que rondará los 70 millones de euros a falta de una confirmación oficial que parece muy cercana.
El extremo pidió hace algunas semanas al club italiano salir en este mercado de invierno. El propio Antonio Conte, entrenador del Nápoles, fue el que hace pocos días confirmó que su pupilo pidió salir del club y dio casi por perdido a uno de los jugadores más queridos por la afición partenopea, rendida al joven 𝐊𝐯𝐚𝐫𝐚𝐭𝐬𝐤𝐡𝐞𝐥𝐢𝐚 que hizo posible el sueño del título liguero en 2023. Aún así, el Nápoles no se quedará de brazos cruzados, y ya ha pedido su recambio: Yeremay, del Deportivo de la Coruña.
El Nápoles se desprende de 𝐊𝐯𝐚𝐫𝐚𝐭𝐬𝐤𝐡𝐞𝐥𝐢𝐚, pero piensa en Yeremay
Y es que, tal y como informa el experto italiano en fichajes Gianluca Di Marzio, en Italia, el club celeste dejará marchar a 𝐊𝐯𝐚𝐫𝐚𝐭𝐬𝐤𝐡𝐞𝐥𝐢𝐚, pero estarían muy interesado en el fichaje de Yeremay Hernández, del Deportivo de la Coruña. El precio del jugador, los veinte millones de euros que marcan su cláusula de rescisión, no rebajan el serio deseo del Nápoles.
El dinero no parece ser un problema para el conjunto napolitano. A expensas de la oficialidad, los italianos ingresarán en los próximos días hasta 70 millones de euros por el traspaso de Khvicha Kvaratskhelia. El georgiano ya se ha despedido de los aficionados del Nápoles y se unirá al PSG para las cuatro próximas temporadas.
Yeremay no dice que no
El caso, que apunta para largo, explotó el pasado sábado tras las siguientes declaraciones del jugador: «No sé si me voy a ir en este mercado porque no sé qué va a pasar. Estuve hablando con mi representante y con el club, pero no me voy a ir por cualquier cosa. Si lo dejo es para dar un pasito más en mi carrera. Ojalá me pueda quedar, pero no lo sé…«.