Bicimad es una de las grandes apuestas del transporte limpio para el Ayuntamiento de Madrid. Las ya famosas, y controvertidas, bicicletas eléctricas son una apuesta tan clara para el ayuntamiento que las han usado como argumento para expulsar tanto a las empresas privadas dedicadas a este sector, así como a las de patinetes eléctricos, como para facilitar el movimiento en las controvertidas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) que nacen con el plan Madrid 360.
En cualquier caso, es evidente que han gustado fuera la zona de gobierno del ayuntamiento de Almeida, pues se empiezan a dar los pasos para expandir su alcance. En este caso se trata de la llegada de las famosas bicicletas azules a Pozuelo de Alarcón, un paso importante en su aceptación, que además va de la mano del anuncio que este medio de transporte será gratuito los mismos días que lo sea la EMT. Es un paso importante para el crecimiento de la bicicleta como medio de transporte de uso habitual en la capital, pero también es evidente que todavía son muchos los problemas que quedan por resolver para facilitar esta realidad.
Uno de estos, como lo han explicado una y otra vez las agrupaciones de ciclistas de la capital, es el espacio que deben ocupar los carriles para las bicicletas y la protección que deben tener en los mismos. Es que es una realidad evidente, sobre todo al ver los accidentes que han ocurrido en Madrid, sobre todo de repartidores y de personas que trabajan con su bicicleta, y en particular medidas de protección para horarios nocturnos, donde es más común que los ciclistas colisionan con otros vehículos.
Es que la realidad es que protestas como la de Bicicritcica, realizada de forma permanente una vez a la semana para protestar por estas circunstancias. Es que los accidentes de los ciclistas demuestran lo complicado que es para estos viajeros moverse de forma segura, y lo indefensos que están, sobre todo en horas de la noche, incluso usando la ciclovía de las ciudades.
MADRID SE ENFOCA EN RESOLVER LOS PROBLEMAS DEL SERVICIO DE BICIMAD
Lo cierto es que esta expansión viene de la mano de un esfuerzo del ayuntamiento para resolver los problemas del servicio. Hace unos días un error de la aplicación la hizo inútil por varias horas, lo que hizo evidente los problemas que vienen de la mano de la expulsión de otros servicios de micromovilidad que operaban en la ciudad. Es una realidad complicada de ignorar, sobre todo si Madrid espera no solo que el resto de las ciudades de la comunidad la asuman, sino que se replique el modelo más allá de España.
Es un esfuerzo importante, y aunque poco a poco se han resuelto algunos problemas clave del servicio. Ya no es tan común que se encuentren las estaciones de carga vacías sin bicicletas, o estaciones demasiado llenas en las que no se pueden dejar las bicicletas. Es una pieza interesante dentro del panorama del transporte, en especial en un momento de transformación clave para todo el sector debido a las exigencias de Bruselas de que las ciudades tengan sistemas de transporte cada vez más limpios.
De hecho, la apuesta no es solo madrileña, ni es solo española, es cada vez más común en Europa y en el resto del planeta apostar por este tipo de movilidad. Es un paso que se está dando en Europa, sobre todo en lugares como Países Bajos o París, donde la apuesta ha conseguido normalizar el uso de estos vehículos en ciudades hasta hace poco entregadas al coche.
ESPAÑA TAMBIÉN QUIERE INVERTIR EN LA BICICLETA COMO MEDIO DE TRANSPORTE
El pasado mes de septiembre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció una inversión de 40 millones de euros para promover el uso de la bicicleta en las ciudades, la mitad se destinará a los servicios de bicicletas públicas en las ciudades y la otra mitad a bicicletas con asistencia eléctrica para particulares y empresas de reparto.
«Me gustaría pedirles a los alcaldes que no se dejen llevar por el oscurantismo anticlimático de algunos partidos políticos que desmantelan carriles bicis y zonas peatonales, incluso cuando ya han llegado las ayudas de Europa y han sido pagadas precisamente por los fondos ‘Next Generation», defendió en su momento en una rueda de prensa desde el Ministerio de Transporte y Movilidad Sostenible.