Elegir el vino adecuado para la cena de Navidad puede parecer un desafío, especialmente cuando queremos sorprender a nuestros invitados o acertar como anfitriones. La clave está en combinar el menú con los mejores vinos, equilibrando sabores y creando una experiencia inolvidable. Tanto si eres amante del tinto, blanco o espumoso, aquí te damos las mejores recomendaciones para triunfar en esta noche tan especial.
1Vinos tintos: una elección clásica y versátil
Esta bebida suele ser la protagonista en muchas mesas de Nochebuena gracias a su versatilidad y elegancia. Para carnes rojas asadas, como cordero o cochinillo, opta por tintos estructurados y con crianza, como un Rioja o un Ribera del Duero, que aportan cuerpo y equilibrio a los sabores intensos. Si el menú incluye aves como pavo o capón, un tinto más ligero, como un Pinot Noir, es ideal para acompañar sin eclipsar el plato.
Además, los tintos también pueden romper lo convencional: un vino joven y frutal, como un Garnacha, marida a la perfección con pescados grasos como el salmón o la lubina. La clave está en buscar equilibrio entre los sabores del plato y la intensidad del vino.