La Navidad de 2024 se perfila como la más cara de la historia, especialmente en lo que respeta al marisco, que ha alcanzado precios desorbitados. Según datos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), algunos de los productos más emblemáticos de las cenas navideñas, como las angulas, se están vendiendo a 1.369,38 euros el kilogramo, mientras que los percebes gallegos superan los 80 euros el kilo.
Este encarecimiento, de entre un 12% y un 30%, ha sido especialmente notorio en productos de oferta limitada y alta demanda durante las fiestas. A esto se suma un incremento general de precios, con un aumento del 6% en los alimentos en lo que va de diciembre, lo que convierte a la Navidad de 2024 en una de las más caras para los consumidores.
Por otro lado, aunque otros productos como el cordero y los langostinos han mantenido sus precios estables, las familias españolas se verán obligadas a ajustar sus presupuestos para no sobrepasar sus capacidades. De acuerdo con un estudio de la plataforma eToro, el coste de una cena navideña típica para una familia de cuatro personas ha ascendido a 67,07 euros, lo que representa un incremento del 2% respecto al año anterior. Además, la OCU advierte que, en general, los precios de los alimentos siguen siendo unos 35,5% más caros que hace tres años, lo que ha obligado a muchas familias a reconsiderar sus compras navideñas.
El alto costo de los alimentos, y particularmente el marisco, se ve reflejado también en el aumento de las solicitudes de créditos rápidos, lo que indica que los consumidores están recurriendo a métodos financieros de corto plazo para cubrir estos gastos extraordinarios. Este patrón refleja una tendencia peligrosa de gasto por encima de las posibilidades económicas, alertando sobre la necesidad de ser más conscientes y planificar mejor los gastos en estas fechas.
El marisco alcanza precios récord: ¿Por qué es tan caro este año?
Este año, los precios del marisco han alcanzado cifras récord debido a una serie de factores que afectan tanto la oferta como la demanda de estos productos en las semanas previas a las festividades. Según el informe de la OCU, el besugo ha subido un 180%, las angulas un 112% y las ostras un 52%, lo que representa un fuerte encarecimiento de los productos más demandados en las cenas navideñas.
Este aumento de precios se debe principalmente a la escasez de capturas en el mar, agravada por condiciones climáticas adversas, como el aumento de la temperatura del agua, lo que afecta a las especies más sensibles y reduce la oferta disponible para su comercialización en los mercados.
La demanda de mariscos como los percebes y la merluza también ha impulsado el incremento de precios. Los percebes han experimentado un aumento del 30% y la merluza un 19% en las últimas semanas, lo que refleja una fuerte presión sobre la oferta debido a la sobrepesca y las condiciones difíciles para los pescadores.
A medida que se acerca la Navidad, la competencia por estos productos aumenta, lo que eleva los precios aún más. Además, la inflación generalizada también ha afectado a otros productos tradicionales de la Navidad, como el cordero, que ha subido un 16%, y el turrón, que presenta incrementos de hasta un 21% en sus ingredientes clave como el chocolate y el cacao.
Este año, el precio de la cesta de Navidad se ha incrementado un 7,3% en comparación con 2023, lo que supone una diferencia considerable respecto a hace 10 años, cuando los productos navideños eran un 55% más baratos. En términos absolutos, el cordero y el besugo son los productos que más han subido, alcanzando precios históricamente altos. Frente a estos aumentos, muchos expertos recomiendan planificar las compras con antelación para aprovechar las ofertas previas a las festividades y evitar sorpresas desagradables en la factura.
El impacto del aumento de precios en las familias españolas: ¿Cómo ajustarse a la nueva realidad?
El aumento de los precios de los alimentos navideños está obligando a las familias españolas a adaptarse a una nueva realidad económica. Según la OCU, los productos típicos de las cenas navideñas han subido un 7,3% en comparación con el año pasado, lo que ha disparado el coste de las celebraciones.
Alimentos como el besugo (que ha aumentado un 180%), los percebes (30%) y el cordero (16%) han alcanzado precios récord, y las familias se ven obligadas a replantear sus menús para ajustarse a su presupuesto. Esta situación ha llevado a muchas personas a sustituir algunos productos caros por alternativas menos costosas, como el pavo, que solo ha subido un 13% en los últimos años, o incluso a optar por platos más simples, como ensaladas y verduras.
Además de cambiar los productos de las cenas, muchas familias han comenzado a ajustar la cantidad de comida que compran, evitando el despilfarro. Con el aumento generalizado de precios, como el 21% de incremento en el chocolate y el 2,4% en los huevos, las familias españolas se ven forzadas a planificar con más cuidado sus menús navideños para evitar que el gasto se dispare. Algunos incluso optan por comprar productos de marcas blancas o de menor precio en lugar de las marcas tradicionales, lo que les permite reducir el coste total de la compra sin sacrificar demasiado la calidad de los platos.
El precio de la cesta navideña ha subido significativamente en la última década, con un incremento cercano al 50% en comparación con 2015. Esto ha llevado a muchas familias a replantearse sus costumbres, buscando alternativas que les permitan mantener el espíritu navideño sin comprometer tanto su bolsillo. A pesar de la inflación, algunas familias prefieren reducir la cantidad de mariscos o carnes caras, e incorporar más platos caseros y económicos para equilibrar su presupuesto.
Cómo la inflación y el gasto impulsado por las fiestas están afectando las finanzas personales
La inflación, combinada con el aumento de los gastos propios de las fiestas, está ejerciendo una presión significativa sobre las finanzas personales de los españoles. Los productos navideños más habituales, como los mariscos, el cordero y el besugo, han visto incrementos de precios significativo lo que obliga a muchas familias a gastar más de lo planeado.
Este gasto adicional, sumado a otros compromisos típicos de la Navidad, como los regalos y las celebraciones, está llevando a muchos consumidores a recurrir a soluciones financieras como los créditos rápidos o las tarjetas de crédito. Según el Banco de España, las solicitudes de crédito personal aumentan un 6% durante la temporada navideña, lo que refleja cómo la necesidad de cubrir estos gastos extraordinarios afecta directamente a las finanzas de los hogares.
El uso de tarjetas de crédito también se dispara en este período, ya que muchas personas optan por financiar sus compras navideñas a plazos. Con una tasa de interés promedio del 20% en tarjetas de crédito, este comportamiento puede tener consecuencias a largo plazo en las finanzas personales.
Un informe de la OCU revela que más del 30% de los consumidores recurren a los pagos a plazos durante las fiestas para gestionar el impacto del aumento de precios. Sin embargo, este método puede terminar costando mucho más debido a los altos intereses que se aplican si no se saldan las deudas a tiempo. En este sentido, la inflación no solo aumenta el costo inmediato de las festividades, sino que también puede crear una carga financiera que perdura meses después de que se apaguen las luces del árbol de Navidad.
El endeudamiento durante las fiestas no es exclusivo de las grandes ciudades, sino que afecta a hogares de todo el país. De hecho, el 40% de los hogares españoles han reconocido haber gastado más de lo que habían planeado debido al encarecimiento de los productos típicos de las festividades. Con un 5,2% de aumento en la cesta de la compra navideña en comparación con el año pasado, muchas familias se ven tentadas a aumentar sus líneas de crédito para poder cubrir el desajuste. Esto genera una espiral en la que el consumo desmedido durante las fiestas se combina con una falta de previsión financiera, lo que puede poner en riesgo la estabilidad económica de los hogares en el futuro cercano.