Antiviolencia solo impone sanciones a los autores y perdona al club
Casi un mes después de los hechos ocurridos en el partido entre el Real Madrid y el FC Barcelona la Comisión Antiviolencia del Consejo Superior de Deportes (CSD) ha dictado su veredicto y, por fin, se conocen las sanciones para los autores de los insultos racistas que Lamine Yamal, Raphinha o Balde tuvieron que soportar procedentes de una parte serie de energúmenos presentes en grada del Estadio Santiago Bernabeu.
La sentencia de este organismo ha generado mucha polémica en el fútbol español pues, en este caso, ha considerado que solo se debe sancionar a los personajes directamente implicados. De esta manera, y a diferencia del criterio aplicado en situaciones similares anteriores, el Real Madrid no deberá afrontar el cierre parcial de su estadio.
Castigos y multas solo para los implicados
La Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte del CSD ha considerado que solo los autores de los insultos racistas dirigidos a los futbolistas del FC Barcelona en el Santiago Bernabeu deben pagar por sus actos. Así, este organismo les impone una multa de 5.000 euros, una cantidad que se ha visto aumentada al haber un menor entre los afectados (Lamine Yamal).
Además, para todos los implicados, la Comisión Antiviolencia le impone también la prohibición de acceso a recintos deportivos durante un periodo de 12 meses. El Real Madrid, por su parte, no impondrá ninguna sanción adicional puesto que ninguno de los involucrados son socios del club y dejará todo en manos de la justicia.
El Real Madrid no pagará el pato
La ausencia de sanción al Real Madrid, que no deberá afrontar el cierre parcial del Estadio Santiago Bernabeu, ha puesto en pie de guerra a varios equipos de nuestra liga. El primero de ellos es el Valencia CF que vio como el Comité de Competición le imponía una multa de 45.000 euros y el cierre parcial de Mestalla tras los insultos racistas a Vinicius.
Tampoco entienden esta decisión en el Atlético de Madrid. Los rojiblancos tuvieron que recurrir a Apelación después de que Competición propusiese el cierre parcial del Metropolitano y una cuantiosa multa por los insultos a Nico Williams. En cualquier caso, lo que queda claro es que el racismo y la violencia no pueden tener cabida en el fútbol.