PTO. DE LA CRUZ: Loro Parque da la bienvenida a un nuevo jaguar

De nombre Naya, es una hembra y ha llegado desde Martinica, en el Caribe, como parte de

un programa de crianza, con el objetivo de que pueda reproducirse

Un nuevo jaguar, hembra y de nombre Naya, ha llegado a Loro Parque para quedarse. Este ejemplar de Panthera onca ya ha superado el período de adaptación a su nuevo hogar y a su compañero Gulliver, y desde hace varias semanas puede observárseles juntos en sus instalaciones exteriores en el Parque.

Loro Parque Da La Bienvenida A Un Nuevo Jaguar 3Naya forma parte de un programa de conservación dentro del Programa Europeo de Especies en Peligro (EPP), al que se encuentran adscritos los zoológicos vinculados a la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA). Así, llega a Loro Parque desde Martinica, en el Caribe, con el objetivo de que pueda reproducirse.

El jaguar es el felino de mayores dimensiones de Sudamérica y el tercero más grande del mundo, después del tigre y el león. Dentro de su rango, es el animal que se encuentra en la cima de la cadena alimenticia, y puede vivir en hábitats tan diferentes como el bosque tropical pluvioso del Amazonas o las secas estepas del sur de Sudamérica.

En la naturaleza, se alimenta de una variedad de presas vivas, desde pescado hasta grandes mamíferos e incluso pequeños caimanes. Además, es conocido por tener las mandíbulas más fuertes dentro del grupo de los grandes felinos. En general, y exceptuando las épocas de cría y reproducción, es un animal solitario.

Panthera onca es una especie categorizada como Casi Amenazada en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) y uno de los mayores peligros a los que se enfrenta es a los altos índices de deforestación en América Latina. La fragmentación de sus hábitats los aísla y los hace más vulnerables a la persecución humana.

Loro Parque Da La Bienvenida A Un Nuevo JaguarLa caza comercial de los jaguares para la obtención de sus pieles ha decrecido drásticamente desde mitad de los años 70 gracias a las campañas antipieles y al control y cierre progresivo de los mercados internacionales. Sin embargo, sigue habiendo demanda de sus patas, dientes y otros productos.

Loro Parque, como centro de conservación de la vida silvestre, afianza así su compromiso con la protección de la naturaleza y de las diferentes especies, lo que lo convierte en una auténtica embajada de los animales salvajes.