Los Soprano es una de las series más aclamadas de la televisión, no solo por su trama intrigante, sino también por su capacidad para mostrar el mundo de la mafia de una forma más realista y cruda que muchas otras producciones. Sin embargo, lo que muchos no saben es que uno de los actores de la serie no solo interpretaba a un mafioso, sino que había vivido en ese mundo antes de llegar a la pantalla. Tony Sirico, quien interpretó al temido Paulie Gualtieri, fue un verdadero criminal en su juventud, lo que le otorgó una autenticidad única al personaje. A continuación, exploramos la vida de este actor que pasó de las calles a la fama.
1La vida criminal de Tony Sirico
Antes de convertirse en una estrella de la pantalla, Tony Sirico era conocido por su vida en el crimen. Nacido en Nueva York, Sirico creció en un ambiente donde la delincuencia era común. En su juventud, su actitud rebelde y su inclinación por las malas decisiones lo llevaron a ser arrestado en 28 ocasiones por crímenes como extorsión, agresión y posesión ilegal de armas. En un incidente especialmente violento, incluso fue baleado durante una disputa por una mujer.
En 1971, Sirico fue condenado a cuatro años de prisión por cargos de extorsión y posesión de un arma de fuego. Durante su tiempo en la cárcel, la vida de Tony comenzó a dar un giro inesperado. Un grupo de teatro formado por ex-presidiarios le mostró el poder del arte, y fue en ese momento cuando Sirico decidió cambiar su destino.