Un nuevo video se ha viralizado en Internet, En sus imágenes se puede apreciar como varios crustáceos con aspecto de langosta devoran el cadáver de un cocodrilo varado en el fondo del mar.
Según el portal especializado ‘Live Science’, el cuerpo del cocodrilo se encuentra a unos dos kilómetros de profundidad en el Golfo de México y está siendo degustado por unos isópodos de gran tamaño, cuya mordedura es capaz de atravesar la piel del reptil. conocida por su dureza.
Estos isópodos pueden aguantar meses, e incluso años, entre comida y comida, tal y aseguraron los investigadores Craig McClain y Clifton Nunnally, ambos del Consorcio Marino de las Universidades de Louisiana.
«Tienen esta increíble habilidad para amontonarse, almacenar esa energía y luego, básicamente, no tener que volver a comer durante meses o años», explicó McClain.
Los isópodos son crustáceos que datan de 300 millones de años de antigüedad. Los isópodos que aparecen en el vídeo desempeñan un papel de animal carroñero. En menos de 24 horas, muchos de estos crustáceos habían alcanzado el interior del cuerpo del animal.
Las imágenes forman parte de un estudio que intenta determinar el impacto de los cadáveres de estos animales tienen en el ecosistema marino al reposar sobre su fondo. Para ello, los investigadores esparcieron los varios cocodrilos muertos, donados por el estado de Louisiana.
«El océano profundo es un desierto de alimentos, salpicado por oasis de alimentos», dijo Nunnally.
Es la primera vez que se graban imágenes de semejantes características.
