Canarias se encuentra en el centro de un debate político en relación con la autonomía del Sáhara Occidental. El presidente canario, Fernando Clavijo, ha defendido la postura del Gobierno de España en este asunto, generando controversia y acusaciones de «traición» por parte de la oposición.
Clavijo insiste en que la comunidad autónoma carece de competencias en política exterior, limitándose a acatar las decisiones del Gobierno central. Esta postura ha sido criticada por el portavoz de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-bc), Luis Campos, quien la considera una ruptura con la tradición histórica de apoyo al pueblo saharaui por parte de las instituciones canarias.
El debate sobre la autonomía del Sáhara Occidental
El debate sobre la autonomía del Sáhara Occidental ha llegado al Parlamento Canario, donde se han producido fuertes enfrentamientos entre el presidente Fernando Clavijo y la oposición. Luis Campos, portavoz de NC-bc, ha acusado a Clavijo de «traición histórica» al pueblo saharaui por asumir la política del Gobierno español sobre el Sáhara Occidental durante su visita a Marruecos. Campos ha recordado el histórico apoyo al derecho de autodeterminación del pueblo saharaui por parte del Parlamento, los Cabildos, los Ayuntamientos y los sucesivos gobiernos de Canarias.
Esta postura histórica, basada en la defensa de los derechos humanos y la legalidad internacional, según Campos, ha sido abandonada por primera vez por un presidente canario. El portavoz de NC-bc ha exigido a Clavijo una rectificación y una declaración clara sobre la posición del Gobierno de Canarias en este asunto.
La defensa de Clavijo
Ante las acusaciones, Fernando Clavijo ha defendido su postura argumentando que, en un Estado democrático de derecho, cada institución tiene sus competencias. En este sentido, ha insistido en que la política exterior es competencia exclusiva del Gobierno de España, y que el Gobierno de Canarias debe respetar la legalidad y las decisiones tomadas por el Gobierno central.
Clavijo ha recordado que las relaciones internacionales son un asunto delicado que requiere una estrategia coordinada y coherente a nivel estatal. Además, ha destacado la importancia de la estabilidad regional y la cooperación con los países vecinos para el desarrollo económico y social de Canarias. El presidente canario ha subrayado la necesidad de diálogo y entendimiento entre las diferentes administraciones para abordar cuestiones complejas como la del Sáhara Occidental, buscando soluciones que beneficien a todas las partes implicadas.
También ha criticado la actitud de Luis Campos, calificando sus intervenciones de «discursos grandilocuentes» y recordando las declaraciones de Román Rodríguez, dirigente de NC-bc y expresidente del Gobierno de Canarias, quien durante una visita a Marruecos manifestó su apoyo a las tesis del Gobierno de Madrid en relación con las antiguas colonias españolas.