Son muchas las controversias que Renfe ha asumido en los últimos meses. La ferroviaria estatal ya era clave en el día a día de los españoles, pero los descuentos impulsados primero por la pandemia y después por la crisis económica derivada de la invasión rusa en Ucrania. Esto ha hecho que para los usuarios del AVE en ciudades como Valladolid y otras zonas de Castilla y León cercanas a Madrid, la alta velocidad, en formato AVANT se ha vuelto tan importante como los servicios de cercanías para quienes viven en las periferias de Madrid.
Por eso, la Federación de Asociaciones de Usuarios del AVE de Castilla y León han querido llamar la atención sobre la situación antes que se acabe el año y con los bonos actuales en el transporte de cercanías y media distancia. En un documento entregado al ministerio de transporte recuerda que en este momento los bonos para los usuarios no diferencian entre los usuarios recurrentes y los casuales que usan uno de estos servicios por motivos de ocio o de vacaciones.
La realidad es que para la ciudad el problema no es solo el costo del servicio para los usuarios, sino que se resuelve el problema para muchos de los habitantes que hoy viajan todos los días en AVE o AVANT hasta Madrid no quedará opción, sino mudarse a una capital donde la vivienda ya está bastante tensionada.
«Le hemos dado y ahora sí una herramienta que, definitivamente, ha dado la vuelta a la población en varias provincias de Castilla y León. Si son unos precios inasumibles, pues lógicamente todo lo ganado o al menos parte de lo ganado, lo perderemos. Si volvemos a cobrar 500 o 600 euros al mes por venir a trabajar tres días aquí, pues va a ser complicado», sentencia García.
BUENAS SENSACIONES DESDE LAS ASOCIACIONES DE USUARIOS DEL AVE
Aunque el presidente de la asociación de Valladolid recuerda que el calendario juega en contra, queda poco más de dos meses para el fin de año y de los bonos de transporte, asegura que de momento las sensaciones son buenas en cuanto a la respuesta del ministerio. Explica que desde el ministerio les han ofrecido una solución que pasa por calcular el precio con base en los días en que sea necesario usar el servicio para cada usuario, es algo distinto al bono laboral propuesto desde las asociaciones, pero al menos muestra el interés del Gobierno en resolver la situación.
Pero todavía no se informa del precio que tendría esta medida, y los días siguen corriendo con el Ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, distraído con los problemas de la estación de Chamartí como el reciente descarrilamiento que ha interrumpido los servicios tanto del AVE como de uno de los competidores de Renfe, la francesa Ouigo, no han mostrado velocidad en estos procesos. A esto se suma que previamente estos avisos llegaron siempre de último momento, durante el mes de diciembre, lo que complica a los usuarios organizarse para los primeros meses del año.
Pero si bien queda poco tiempo, todavía queda tiempo para resolver la situación. Aunque en público, en Ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha puesto en duda la continuidad de los descuentos actuales, también ha dejado claro que entiende la necesidad de una solución alternativa. De igual modo, las asociaciones de usuarios no tienen más opción de momento que mantener la presión.
PIDEN TAMBIÉN MÁS TRENES PARA VALLADOLID Y CASTILLA Y LEÓN
Además de la situación con los bonos de transporte, desde las Asociaciones también informan que en esta nueva realidad no hay suficientes trenes para atender la demanda. El propio Miguel Ángel García Sánchez narra que muchas veces es necesario reservar los asientos al menos con dos semanas de antelación y lo mismo repiten a este medio testimonios de usuarios residentes en Valladolid. Es importante tener en cuenta esta nueva realidad y no reducir las reformas del tren solo a las rutas de mayor valor turístico.
Es un cambio de paradigma, que aprovecha que estos trenes pueden dejar a los usuarios en su trabajo tras un viaje de apenas una hora. En esa situación es mucho más fácil plantearse vivir cerca de Madrid, o de otras grandes ciudades, que en Madrid, pero es necesario que desde el Gobierno se reconozca esta nueva realidad que ha dado algo de oxígeno a una «España Vaciada» y apunta a que una medida pensada para superar una crisis puede ser clave para resolver un problema de despoblación en algunas zonas importantes del país.
