Los empleados del Santander en los edificios corporativos de banco en España, en las calles Juan Ignacio Luca de Tena y Abelias (cercanos a la A-2 y al Campo de las Naciones), serán los primeros en disfrutar de un servicio de uso compartido de coches eléctricos para sus desplazamientos por Madrid.
En la mayor parte de los países desarrollados, el llamado “car-sharing” está ganando importancia a pasos agigantados. La contaminación urbana está en la raíz de los cambios de las normativas de circulación, de los sistemas de transporte público, de la transformación del sector del automóvil y, cómo no, de la gran incidencia de los problemas respiratorios en la salud de los ciudadanos.
Según anunció a finales de 2018 la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), la exposición prolongada a la contaminación atmosférica provocó la muerte prematura de 518.700 personas en 41 países de Europa en 2015. En España fueron 38.600 las víctimas, un 23% más que el año anterior.
De este modo, el Santander pone ahora en marcha una iniciativa pionera en el mundo empresarial. Además de los car2go, eMov, ZITY, Wible… Por la ciudad se verán algunos de los coches eléctricos proporcionados por Bansacar, la compañía de renting de automóviles del banco.
El objetivo es facilitar la movilidad de los empleados, al tiempo que se contrribuy mediante vehículos eléctricos, lo que contribuye a reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera.