No hay nada más tétrico que un pueblo en ruinas, especialmente si va acompañado de leyendas e historias que señalan un pasado lleno de misterio. En lo profundo de las montañas de la provincia de Tarragona, en Cataluña, España, se encuentra un lugar que ha capturado la imaginación de exploradores, investigadores y entusiastas de lo paranormal por igual: La Mussara. Este pueblo abandonado ha permanecido congelado en el tiempo, pero su atmósfera sombría y sus relatos sobrenaturales lo han convertido en un destino lleno de intriga.
1Historia y contexto
Ubicada en una colina a unos 1.000 metros sobre el nivel del mar, La Mussara ofrece un paisaje espectacular. Desde sus alturas, se pueden contemplar vistas panorámicas que abarcan desde Tarragona hasta el Delta del Ebro, e incluso, en días despejados, se puede divisar la nieve de los Pirineos o las lejanas costas de Mallorca.
Este pequeño pueblo tiene una historia que se remonta a la época romana y ha experimentado varias transformaciones a lo largo de los siglos. Su nombre aparece mencionado por primera vez en una carta de población en 1173, cuando el rey Alfonso I confirmó propiedades al arzobispo de Tarragona. Posteriormente, la iglesia de San Salvador, el único edificio que aún se mantiene en pie, fue nombrada en una bula papal de Celestino III en 1194. El pueblo formó parte del condado de Prades desde su fundación, lo que indica su importancia en la región.