Imagina que sales a la calle y, al llegar a tu coche, encuentras una pequeña nota en el parabrisas. El mensaje es cortés: alguien, al parecer, ha golpeado tu coche y quiere hacerse cargo de los daños. Han dejado su número de contacto para que puedas llamarlos y coordinar todo con su seguro. Lo que parece un gesto de responsabilidad y honestidad puede ser, en realidad, el comienzo de una estafa. Así lo ha advertido Andrés Millán, uno de los abogados más seguidos en redes sociales en España, conocido por sus consejos bajo el nombre de @lawtips.
1Una nota aparentemente inocente que esconde una trampa
La estrategia de los estafadores es simple pero efectiva. Todo comienza cuando te abollan ligeramente el coche, dejándote una nota que asegura que la persona responsable quiere solucionar el problema. El papel suele incluir un mensaje como: «Disculpa, le he dado un golpe a tu retrovisor. Llámame para arreglarlo». Cualquiera que lea estas líneas podría sentirse aliviado, pensando que la persona al menos ha tenido la decencia de asumir la responsabilidad. Sin embargo, todo esto forma parte del engaño. Es justamente esa sensación de confianza lo que hace que el esquema funcione tan bien. Al llamarlos, piensas que todo va a resolverse de forma rápida y sencilla.
